El FC Barcelona de Joan Laporta ya tiene el OK de las palancas y un plan económico definido. Una vez empiece a hacer oficiales las nuevas vías de ingreso para oxigenar las cuentas del club, se potenciarán algunas operaciones con las que el primer equipo desea reforzarse en el mercado de fichajes.
Tres objetivos sobre la mesa
El objetivo de Joan Laporta es firmar un hat-trick de fichajes del más alto nivel de cara a la próxima campaña 2022-23: Jules Koundé, Robert Lewandowski y Bernardo Silva. Se da el caso de que Xavi Hernández quiere tener su equipo completo antes de viajar a Estados Unidos el próximo 16 de julio, por lo que la entidad culé tiene menos de un mes, a día de hoy, para impulsar la llegada de las caras nuevas.
Un desafío mayúsculo, si tenemos en cuenta que los tres clubes de origen de los jugadores deseados les han colocado precios desorbitados, unas cantidades que el FC Barcelona difícilmente asumirá pese a activar las palancas económicas que tiene previstas.
Dificultades para cerrar los fichajes
El Sevilla pide 65 millones de euros por Koundé y, aunque el central francés prefiere fichar por el Barça, otros grandes clubes de Europa como el Chelsea ofrecen más dinero y tienen todas las papeletas de llevarse el gato al agua.
En lo que respecta a Robert Lewandowski, el Bayern Múnich sigue negándose a dar salida al delantero polaco, y en caso de hacerlo solicitará cifras cercanas a los 50 millones de euros, a las cuáles el club azulgrana no está dispuesto a llegar.
Por último, el Manchester City no tiene ninguna necesidad actualmente en traspasar a Bernardo Silva, y pedirá entre 80 y 100 millones por su fichaje al FC Barcelona. Un conjunto de aspectos que, sin duda, pondrá en aprietos la planificación deportiva del primer equipo de cara al próximo curso.