No es ningún secreto que Robert Lewandowski es el principal objetivo del FC Barcelona para reforzar su delantera este verano. El futbolista ya ha dejado claras sus intenciones de jugar en el Camp Nou la próxima temporada 2022-23, pero el Bayern Múnich insiste en que le queda un año de contrato por cumplir, hasta junio de 2023, y que por ahora no tienen pensado dejarle marchar.
Las declaraciones del delantero polaco a lo largo de esta última semana, en la que varias veces ha remarcado su deseo de poner fin a la etapa en el conjunto bávaro y viajar rumbo a Barcelona, han servido para presionar hasta el límite a la cúpula directiva del equipo alemán. Tanto, que incluso Lewandowski decidió rebajar un poco el suflé en una entrevista a Bild, consciente del nivel de crispación que estaba generando en Múnich.
El Bayern juega sus cartas
Desde el club bávaro han agradecido que Lewandowski haya rebajado la intensidad de sus declaraciones públicas, aunque le siguen recordando que tiene contrato vigente y que, por mucho que hable ante los medios, la postura actual del club no ha cambiado. "Tiene contrato hasta 2023”, ha insistido el director deportivo del Bayern, Hasan Salihamidzic. “Estamos muy contentos de que siga aquí. Creo que a partir de ahora las cosas se calmarán”, añade.
En este sentido, el director deportivo del conjunto germano ha desvelado las conversaciones que ha mantenido en los últimos días con Lewandowski, a fin de que las aguas vuelvan a su cauce habitual. “Hablamos de sus declaraciones públicas y de que todos tendríamos que calmarnos”, señala Salihamidzic. En Alemania continúan teniendo muy claro que no se desprenderán fácilmente del polaco, que acumula siete temporadas seguidas superando los 40 goles.
Jarro de agua fría para el Barça
El Bayern, por tanto, sigue jugando sus cartas y envía un nuevo jarro de agua fría al FC Barcelona. Porque, aunque el deseo de Lewandowski sea vestir de azulgrana este mismo verano, no será posible mientras los alemanes se nieguen a negociar un precio de traspaso.
Y el FC Barcelona, estando como está a nivel económico, no podría asumir un coste de la operación que sobrepasara los 35-40 millones de euros. La hipotética llegada de la gran estrella polaca, en definitiva, sigue estando en el aire para un Xavi que desea encarecidamente su fichaje. La incorporación, aunque no es de urgencia extrema por la presencia de Aubameyang y otros efectivos de calidad en la plantilla, sí solucionaría muchos de los problemas ofensivos del equipo.