La puerta está abierta. Eso es lo que se desprende de las últimas declaraciones que ha ofrecido a los medios Raphael Belloli, padre de Raphinha. El FC Barcelona lleva meses interesándose por el futuro del extremo brasileño del Leeds United, que a sus 25 años podría abandonar el conjunto inglés este verano para recalar en el Camp Nou siempre y cuando se cumpla una serie de condiciones.
Operación a tres bandas
Preguntado por el posible cambio de aires rumbo a la capital catalana, Belloli no se ha escondido: "Existen posibilidades, pero estas posibilidades involucran a tres partes: el club interesado, el actual y el jugador", ha destacado el progenitor del futbolista, además de recordar que Raphinha "está tranquilo porque tiene contrato y todas las opciones dependen de él. Lo que él sabe es lo que ha salido en la prensa, nada más".
El atacante brasileño, representado por Deco, aterrizaría en el Camp Nou para cubrir las bajas de Adama Traoré, que volverá al Wolverhampton una vez acabada su cesión en el combinado azulgrana, y Ousmane Dembélé, que continúa sin renovar y en las próximas horas podría anunciar oficialmente su marcha.
Un gol que lo complicó todo
El FC Barcelona lleva meses siguiendo de cerca la progresión de Raphinha, que hace apenas una semana consiguió la permanencia en la Premier League del Leeds United al anotar un gol de penalti en un partido determinante. Una permanencia que es buena para su actual equipo, pero que complicó las posibilidades de que pueda recalar a corto plazo en el Barça.
Y es que, si el conjunto de Elland Road hubiese descendido a la segunda división inglesa, el futbolista brasileño habría tenido una cláusula de salida de 25 millones de euros. Ahora, el Barça deberá negociar el fichaje con el Leeds, que podría pedir 50 millones por su salida a no ser que los culés consigan abaratar el precio, puede incluso que con la inclusión de algún futbolista.
A día de hoy, la ilusión del brasileño es aterrizar en el FC Barcelona y su entorno directo ve opciones de que la operación fructifique, aunque de momento se muestra prudente. Mateu Alemany, Jordi Cruyff y compañía, con la participación de Deco, deberán agilizar la llegada de un futbolista que podría revolucionar la posición de extremo en Can Barça. Todavía más, claro está, si Dembelé hace las maletas.