El juego de cromos del Barça con los cedidos que vuelven (y los que se irán)
Mateu Alemany, con el visto bueno de Xavi, debe gestionar la intríngulis de las cesiones
15 mayo, 2022 14:00Finalizada ya prácticamente la temporada 2021-22, la dirección deportiva y la secretaría técnica, siempre con la supervisión de Laporta y el consejo del cuerpo técnico de Xavi Hernández, trabajan en garantizar una mejora en la competitividad de la plantilla de cara al próximo curso. Llegarán futbolistas y se marcharán otros, aunque es una incógnita saber qué pasará con el futuro de algunos jugadores en una situación delicada.
Muchos de esos casos tienen que ver con jugadores que actualmente se encuentran cedidos en el primer equipo y harán las maletas con toda probabilidad en cuestión de semanas. También, a la inversa, con azulgranas que el club cedió a otros equipos para que se fogueasen y que, ahora, regresarán de forma temporal o permanente a las órdenes de Xavi.
Por ahora, el FC Barcelona ya ha resuelto el caso de Philippe Coutinho logrando un ingreso de 20 millones de euros por la venta del brasileño, que seguirá militando en el Aston Villa de Gerrard la próxima campaña, ya sin vínculo contractual con la entidad culé.
Adama y Luuk, adiós al Camp Nou
Distinta es la situación de Adama Traoré y Luuk de Jong. El primero llegó en enero procedente del Wolverhampton y, si el FC Barcelona aspira a su contratación, deberá pagar a los lobos un montante de 30 millones de euros. Visto el flojo rendimiento de la Flecha de L'Hospitalet en las últimas semanas, totalmente superado por Ousmane Dembelé y el resto de efectivos de ataque en las alineaciones, parece muy complicado que el Barça vaya a efectuar dicho pago. En este sentido, lo más probable es que el extremo catalán regrese a la disciplina inglesa y ponga fin a su particular Erasmus en el conjunto culé.
En lo que respecta a Luuk de Jong, el contexto es parecido aunque con matices. El delantero holandés ha cumplido con creces en cuanto a rendimiento, consagrándose como uno de los máximos goleadores del equipo a pesar de haber jugado tan sólo a ratitos y haber sido muy criticado en sus primeros partidos. Xavi ha sabido explotar su mejor nivel y, en unas semanas, el delantero volverá a un Sevilla con el que mantiene relación contractual. Así se pondrá fin a su cesión en el FC Barcelona, puesto que pese a sus buenas actuaciones no tiene sitio en la futura plantilla.
Cuatro cedidos vuelven al Barça
Luego está el caso de los jugadores que cedió el Barça y que regresarán a final de curso, a no ser que se marchen traspasados a otros equipos. Se trata de Collado, Iñaki Peña, Pjanic y Francisco Trincao. De todos ellos, el único que no tiene opciones de reforzar al Barça 2022-23 es el centrocampista bosnio, a quien se le buscará una salida para intentar cobrar algo de dinero o, de lo contrario, una nueva cesión.
Iñaki Peña y Collado han aprovechado sus respectivas cesiones en Galatasaray y Granada, el primero consagrándose en la titularidad --y llegando a jugar una buena eliminatoria contra el Barça en Europa League- y el segundo marcando goles y asistiendo en el conjunto nazarí. Xavi siempre se ha mostrado partidario a contar con ambos futbolistas, por lo que se prevé que, al menos, disputen la pretemporada con el equipo azulgrana este verano.
En cuanto a Francisco Trincao, está yendo de menos a más en este último tramo de campaña con el Wolverhampton. Para que tenga opciones de quedarse en la plantilla azulgrana, deberá darse la situación de que salgan Adama --cosa muy probable-- y también Dembelé o Memphis Depay, jugadores con la continuidad en el aire. Si salen varios efectivos, es posible que Xavi acepte contar con el joven extremo portugués de 22 años.
Los casos de Riqui Puig y Mingueza
Por último, cabe recalcar la posibilidad de que este verano el FC Barcelona ceda a otros futbolistas para que obtengan rodaje y minutos en otros equipos. Son los casos, por ejemplo, de Riqui Puig y Mingueza. Los canteranos no han tenido apenas oportunidades esta temporada 2021-22, y podrían hacer las maletas para foguearse y, quién sabe, tener la oportunidad de regresar al Camp Nou en un futuro.