Desde la llegada de Xavi al banquillo, además de los cuatro fichajes en el mercado de invierno, el FC Barcelona ha mejorado progresivamente hasta mantener a día de hoy una racha increíble. Los blaugrana no pierden desde la eliminación en Copa del Rey ante el Athletic Club, vienen de humillar al Real Madrid en el Santiago Bernabéu (0-4) y han demostrado que vuelven a ser capaces de competir (y ganar) a cualquier gran club de Europa. Eso no quita que Laporta y Mateu Alemany sigan muy pendientes del mercado y de sus oportunidades, a fin de mejorar todavía más las prestaciones del equipo.
En este sentido, los pesos pesados de la dirección deportiva llevan meses oteando el horizonte de fichajes y atando en corto a los jugadores que más interesan. Tal y como Joan Laporta reconoció en los últimos días, hay dos fichajes que ya están cerrados y que se harán oficiales una vez haya terminado la presente temporada 2021-22, al estar jugando actualmente en otros grandes clubes de Europa. Se trata de Franck Kessié (AC Milan) y Andreas Christensen (Chelsea), que finalizan contrato y llegarán con la carta de libertad (y un buen sueldo) para reforzar el centro del campo y la defensa, respectivamente.
Con esas dos operaciones ya selladas, Mateu Alemany trabaja con mayor tranquilidad para desatascar hasta diez casos más. Uno de ellos es el posible regreso de Iñaki Peña, que está completando una cesión muy fructífera en el Galatasaray y podría volver a final de temporada para ofrecer competencia a Ter Stegen en la portería. El Barça mantendrá al alemán como referente, pero la intención es que el guardameta alicantino pueda disputar un número cada vez mayor de partidos, empezando por la Copa del Rey.
Incertidumbre en los laterales
En la posición de lateral derecho, el director de fútbol trabaja en dos operaciones para reforzar el puesto. Una de ellas es la de Noussair Mazraoui (Ajax), representado por Mino Raiola y que también interesa al Bayern Múnich. Las últimas informaciones, de hecho, señalan que el conjunto bávaro podría haber adelantado al Barça en la carrera por llevarse al carrilero marroquí.
El otro caso es el de Azpilicueta, que termina contrato en el Chelsea y todavía no ha renovado, lo que le convierte en una buena opción para cualquier gran club de Europa. A sus 32 años, el equipo azulgrana le quiere por su experiencia y polivalencia, pero el navarro tiene más ofertas encima de la mesa y no se descarta que renueve con los blues a última hora, en función de la situación del club.
En lo que se refiere al carril izquierdo de la defensa, Grimaldo y Gayá son los nombres que más suenan para ofrecer competencia a Jordi Alba, y lo más probable es que acabe aterrizando a la plantilla culé uno de los dos. Por último, en la delantera son varios los frentes abiertos. Uno de ellos es el de Adama Traoré, que a final de curso volverá al Wolverhampton a no ser que se ejecute la cláusula de 30 millones o el Barça consiga rebajarla con la inclusión de algún futbolista, como podría ser Trincao (cada vez menos probable).
Una gran estrella para la delantera
La guinda consistirá en cerrar el fichaje de un crack consagrado para la delantera. Erling Haaland no está descartado al cien por cien, pero con el paso de los días han ganado enteros Robert Lewandowski y Mohamed Salah. Ambos acaban contrato en junio de 2023 con Bayern y Liverpool, respectivamente, y no parece que vayan a renovar. Sus clubes podrían traspasarles este verano a un coste muy asequible, en lo que sin duda será una nueva oportunidad para que el Barça se refuerce con un atacante de lujo, después de lo que ya hizo con Aubameyang este invierno. Entre el egipcio y el polaco, de momento es el segundo el que tiene más opciones de vestir de azulgrana.