Adama Traoré es uno de los tres fichajes de la Premier que simbolizan la resurrección del FC Barcelona. Su llegada en el mercado de invierno junto a Ferran Torres y Aubameyang ha devuelto la ilusión a una afición que en los últimos tiempos vivía contagiada por la decadencia del equipo. El Barça de Messi se había ido muriendo de aburrimiento y, tras el impacto económico de la pandemia, la plantilla quedó queda tan debilitada que cayó de la Champions a las primeras de cambio y ahora lucha por acceder a la segunda posición de la Liga, un objetivo que, visto lo visto en los últimos tiempos, suena más a gesta épica que a realidad.
La llegada de Xavi Hernández está cambiando las cosas aunque, el verdadero punto de inflexión ha llegado con los nuevos fichajes que le ha proporcionado el presidente Joan Laporta. Uno de los aspectos que le echa en cara Ronald Koeman, que tan solo recibió fichajes con la carta de libertad cuando le dejaron sin Messi y sin Griezmann y, una temporada antes, solamente le trajeron a Sergiño Dest por 21 millones y al inesperado Pedri, con quien nadie contaba. Koeman, como ha reconocido Xavi este miércoles, tuvo la valentía de apostar por jóvenes valores como Ansu Fati, Araujo, Mingueza, Gavi, Nico y el propio Pedri, pero no le llegó. Al egarense, en cambio, le está sobrando talento desde que llegaron Dani Alves, Ferran Torres, Adama y Aubameyang.
Alves y Adama, un futuro incierto
Tanto Ferran como Auba tienen asegurada su continuidad en el Barça la próxima temporada. No es así, en cambio, en los casos de Alves y Adama. Aunque Xavi está encantado con ellos y en estos momentos su voluntad es que sigan en el equipo el año que viene, la decisión no se tomará hasta final de temporada, como ya hemos ido avanzando en Culemanía. Al final, todos los movimientos estarán supeditados a la situación económica del club y a las verdaderas necesidades, donde el nombre de Erling Haaland está llamado a tomar un protagonismo mayúsculo durante el verano.
Adama Traoré controla el balón en el Barça-Atlético de Liga / EFE
Adama Traoré controla el balón en el Barça-Atlético de Liga / EFE
El caso de Adama es especialmente significativo porque es, posiblemente, el jugador que más esfuerzos ha hecho para venir al Barça. Aubameyang también asumió una importante rebaja salarial, pero se mantiene como un jugador con un buen salario. Adama, en cambio, está cobrando una cifra prácticamente simbólica y muy inferior a lo que percibía en los Wolves para cumplir el deseo de volver a su club donde se formó. Su implicación y voluntad por hacer las cosas bien, en la línea que le pide el entrenador es total, y ha demostrado tener mucho que aportar a pesar de su evidente falta de gol. Es un extremo de los que gustan a Xavi, un especialista que, además, pierde pocos balones.
Rechazó a City y Liverpool
Pero los esfuerzos que ha hecho Adama para ayudar al Barça no son solamente económicos. El extremo de L'Hospitalet también ha renunciado a importantes oportunidades en clubes grandes de la Premier League. Y es ahí donde estalla la bomba informativa a la que ha tenido acceso Culemanía: el joven delantero catalán de origen maliense rechazó propuestas del Manchester City de Pep Guardiola y del Liverpool de Jurgen Klopp. Los dos colosos ingleses se interesaron por su contratación en invierno, viendo que no estaba del todo a gusto con su situación en los Wolves y estaban dispuestos a entrar en la puja por él en verano.
Seguramente era consciente que tanto en Liverpool como en Manchester le esperaba un rol mucho más secundario que en un Camp Nou muy necesitado, pero igualmente tuvo que ser valiente. Adama decidió asumir el riesgo de abandonar la Premier, donde no le había ido mal desde que llegó al Aston Villa tras dejar el Barça en 2015, para regresar a la Liga, donde se estila un fútbol más técnico y táctico, pero no tan físico. El extremo catalán encajaba mejor en Inglaterra, pero se está adaptando a la perfección a las exigencias del fútbol español y, además, lo está haciendo con una enorme profesionalidad.