Cada vez más cerca. El FC Barcelona se ha movilizado rápidamente para aprovechar las oportunidades que se presentan en el mercado, siendo el caso de Andreas Christensen el más reciente. El central del Chelsea, que termina contrato al finalizar la presente temporada, es uno de los grandes objetivos de la entidad culé, que tiene el objetivo de seguir fortaleciendo la línea defensiva. Esos rápidos contactos con el mencionado futbolista parece que han surtido efecto, debido a que las recientes informaciones indican que ya ha pasado la revisión médica.
De acuerdo a la información compartida por Gerard Romero, el defensa danés pasó la revisión médica con éxito el pasado lunes. Hay que recordar que solo un día después se dio el viaje de Mateu Alemany y Jordi Cruyff a la capital inglesa para reunirse con el entorno del jugador, por lo que estaremos hablando de que solo faltan detalles finales para cerrar el contrato. Si bien es cierto que todavía quedan varias semanas para que culmine el actual curso, la estrategia del Barça parece apuntar a anunciar el acuerdo lo antes posible.
Diferentes medios aseguran que Christensen podría ser confirmado como nuevo jugador del FC Barcelona en poco tiempo. Todo apunta a que el contrato del central de 25 años sea por cinco temporadas, aunque se desconoce las aspiraciones económicas en el apartado salarial. La misma fuente indica que los agentes del futbolista viajarán a la ciudad catalana para definir esos últimos detalles.
Christensen, un refuerzo a coste
La inminente llegada de Andreas Christensen supone otro esfuerzo de la directiva de Joan Laporta en cuanto a aprovechar esas oportunidades a coste cero que ofrece el mercado de fichajes. Es evidente que muchos de esos jugadores exigen una prima por aceptar el contrato, pero igualmente son operaciones más asumibles desde lo financiero. Difícilmente el internacional con Dinamarca será el último en llegar por esa vía, tomando en cuenta que el Barça también ha puesto su mirada en César Azpilicueta, Franck Kessié y Noussair Mazraoui, futbolistas que quedarán libres en verano.