El Barça quiere resolver sus problemas con los laterales. El club que preside Joan Laporta busca dos futbolistas de primer nivel para solucionar unas carencias que han quedado en evidencia en los últimos partidos. Las titularidades de Dani Alves y Jordi Alba, en horas bajas, retratan los déficits de un Barça que piensa en Azpilicueta en la banda derecha y tiene a varios candidatos para la izquierda. Descartado prácticamente José Luis Gayà por su elevado coste, Xavi duda entre Tagliafico y Grimaldo, un jugador que abandonó el Camp Nou en enero de 2016 y que ahora podría regresar con muchos galones.
Grimaldo, valenciano de nacimiento, se formó en las categorías inferiores del Barça. Era un lateral llamado a subir al primer equipo, pero no tuvo buena sintonía con Luis Enrique y fichó por el Benfica en enero de 2016 a cambio de 1,5 millones de euros.
Imprescindible en Lisboa
En Lisboa, Grimaldo ha pasado de ser un actor secundario a ser un futbolista imprescindible que lo juega casi todo. Esta temporada, ha participado en el 93% de los minutos que ha disputado el equipo lisboeta. Con contrato en vigor hasta 2023, su valor de mercado es de 20 millones de euros.
El Barça, atento siempre a su progresión, ya intentó fichar a Grimaldo hace un año. El futbolista, por su parte, nunca ha ocultado su deseo de volver a Barcelona. El traspaso no será fácil en el mercado de invierno por su elevado coste, aunque el Barça ofrece a Mingueza, Balde y Riqui Puig como moneda de cambio.
Alejando Grimaldo celebrando un gol con el Benfica / EFE
Grimaldo celebra un gol con el Benfica / EFE
Mingueza, Balde y Riqui
Mingueza (22 años) debutó la pasada temporada con el primer equipo, con Koeman de entrenador. Con Xavi, en cambio, ha perdido notoriedad. Esta temporada, sus actuaciones han sido muy flojas y el actual técnico considera que es un futbolista muy vulnerable.
Balde (18 años) ha participado muy poco con el primer equipo. Ni Koeman ni Xavi le han dado oportunidades en el primer equipo, convencidos de que todavía está muy verde. Es un jugador de futuro que necesita coger experiencia.
La eterna promesa
Riqui Puig (22 años), por su parte, sigue siendo la eterna promesa. Ya lo era con Valverde. Con quien más jugó fue con Quique Setién, pero Koeman ya le recomendó que se buscar un equipo hace un año y medio. Con Xavi todo sigue igual. El centrocampista de Matadepera tiene contrato hasta junio de 2023 y en el Barça darían luz verde a una cesión al Benfica.