Nuevo capítulo en la escalada de tensión que se respira entre Dembelé y el Barça. El atacante francés, que estaba citado junto al resto de sus compañeros este domingo por la mañana en la Ciutat Esportiva para conocer de primera mano la lista de convocados de Xavi Hernández, telefoneó al club para decir que estaba indispuesto y no se presentó a la reunión, saltándose la normativa interna.
El club emitió un comunicado oficial poco después, en el que informaba de la presunta indisposición gástrica de Dembelé: "El jugador del primer equipo Ousmane Dembelé no se ha presentado esta mañana en la Ciutat Esportiva Joan Gamper, tal y como estaba citado, por una indisposición gástrica", ha informado la entidad a través de las redes sociales.
El club estudia una sanción
Pese a que habrá que comprobar si el contratiempo es real o no, no son pocas las sospechas de que el Mosquito ha tirado de excusa para evitar acudir en vano a la Ciutat Esportiva, sabedor de que Xavi Hernández no pensaba convocarle para el partido de este domingo ante el Deportivo Alavés.
Si se demuestra que la indisposición del francés fue falsa, teniendo en cuenta que no es la primera vez que peca de falta de profesionalismo y respeto hacia sus compañeros de equipo, el club se planteará seriamente imponerle un castigo en forma de sanción económica.
Dicha sanción se llevaría a cabo en cumplimiento con el régimen interno de convivencia que ha marcado Xavi Hernández desde su llegada, a fin de que todos los miembros de la plantilla estén plenamente centrados en el trabajo y no pequen de falta de profesionalismo, como habría sido el caso con Dembelé.
Ousmane Dembelé, en un entrenamiento del Barça / FCB
Ousmane Dembelé, en la rampa de salida del Barça / FCB
Falta de profesionalismo
En estos momentos, el caso se encuentra en manos del departamento jurídico del club, que es el que deberá valorar la gravedad del asunto y la sanción correspondiente. De lo que no hay duda es que, con este tipo de gestos, Dembelé sigue labrándose una muy mala imagen tanto para los fans como, sobre todo, los equipos que deseen contratarle en un futuro.
Sabe perfectamente que el club le está buscando una salida antes de que termine el mercado de invierno, pero eso no es excusa para dejar de cumplir con las obligaciones que tiene por contrato. Y por las cuáles el Barça le sigue pagando uno de los sueldos más altos de la plantilla.