Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, busca fórmulas imaginativas para fichar a Álvaro Morata, el gran objetivo de Xavi Hernández para reforzar la delantera tras la contratación de Ferran Torres. El máximo dirigente ya tiene un plan, un pelín rocambolesco, para afrontar otra operació estratégica.

El fichaje de Morata por el Barça cuenta, presuntamente, con el visto bueno del futbolista. El delantero madrileño juega en la Juventus, que le arrancó una cesión de dos años al Atlético por la que abonó 15 millones de euros. En la misma se incluyó una opción de compra por 40 millones.

La deuda por Griezmann

El Atlético, por su parte, rescató el pasado verano a Antoine Griezmann, por quien tendrá que pagar 40 millones de euros dentro de dos años si el delantero francés juega un determinado número de partidos.

Álvaro Morata celebra un gol con la Juventus / EFE



Morata celebra un gol con la Juventus/ EFE

El Barça quiere utilizar los 40 millones que presuntamente le debería abonar el Atlético en un año y medio para comprar a Morata, sin pagar un euro pero sin percibir nada por la cesión de Griezmann.

Operación compleja

Xavi, mientras, espera noticias. La operación es todavía más compleja que la de Ferran Torres porque hay más clubes implicados. El técnico de Terrassa considera que el futbolista madrileño encajaría perfectamente en su esquema. Es un delantero centro con llegada, nada estático, que combina muy bien y con un buen nivel técnico y táctico.

El caso de Morata guarda muchas similitudes con el de Ferran. Ambos jugadores también son del agrado de Luis Enrique, el actual seleccionador español. Y el asturiano, presuntamente, también bendeciría el fichaje de Morata por el Barça.