El Barça está contra las cuerdas en el caso Dembelé. Al borde de un ataque de nervios. Termina 2021 y el club sigue sin tener una respuesta del representante del futbolista sobre la última oferta para prorrogar su contrato. La última reunión entre las dos partes no solucionó nada. Al contrario, constató las enormes diferenciales que persisten entre lo que ofrece el club y lo que pide Moussa Sissoko, el representante de Dembelé.
El optimismo sobre la renovación de Dembelé se diluye hora tras hora. La intención del futbolista de prorrogar su contrato contrasta con la realidad. El delantero todavía no ha firmado y en el Barça tienen claro que Sissoko es quien sigue frenando la operación.
Asunto clave
La renovación de Dembelé era un asunto mayor para Laporta. Como el fichaje de Ferran Torres. El Barça le ofrece una prórroga de su contrato con unas cantidades inferiores a las que percibe actualmente. Al menos, en la parte fija. Con las variables, en cambio, el delantero podría igualar o superar su actual ficha.
El gran problema es Sissoko. El representante siempre ha sido partidario de un trasvase a otro club para cobrar una prima de fichaje y, reunión tras reunión, siempre se ha mostrado muy evasivo.
Sissoko ha mantenido contactos con muchos clubes. Hace un año flirteó con la Juventus y después con el Manchester United, cuyo interés se diluyó con el fichaje de Cristiano Ronaldo. Después ha escuchado al Newcastle y al Bayern de Múnich. También, al Chelsea.
El dilema de Xavi
En el Barça, de momento, guardan silencio. La situación es muy delicada. Si no renueva pronto, Xavi tendrá un dilema. Muchos directivos serían partidarios de que Dembelé no jugara más, pero el equipo no va sobrado de jugadores con talento.
Xavi, públicamente, manifestó que el Barça no prescindiría de Dembelé. Otra cosa podría ser la respuesta de la afición azulgrana, que apenas ha disfrutado co un futbolista que costó mucho dinero (105 millones fijos y 40 en variables) y que ha jugado menos de lo esperado por culpa de las lesiones.