Marc-André Ter Stegen fue, posiblemente, el mejor fichaje de Andoni Zubizarreta. En la búsqueda de un sustituto de garantías de Víctor Valdés, el ex secretario técnico apostó en 2014 por un portero alemán que jugaba en el Borussia Mönchengladbach. Costó 12 millones de euros. Hoy, siete años después, Ter Stegen es el guardameta titular del Barça, pero su rendimiento no es el mismo que en cursos anteriores.

En el Barça están preocupados con Ter Stegen. Antes, el portero alemán salvaba muchos partidos con paradas increíbles. Memorable fue una intervención suya en Múnich, en 2015, premiada como la mejor intervención de la temporada. Sus reflejos y capacidad de reacción frustraban a muchos delanteros. 

Ter Stegen hizo una sensacional parada en el Bayern-Barça de 2015 en Múnich, donde el equipo azulgrana nunca ha ganado / EFE

La mejor parada de Ter Stegen como portero del Barça / EFE

Intervención en Malmoe

Ter Stegen, con contrato hasta 2025, se operó el pasado 20 de mayo de una dolencia en el tendón rotuliano. Fue intervenido en Malmoe por el doctor Hakan Alfredson, quien ya advirtió que la recuperación sería complicada.

Las alarmas por Ter Stegen se dispararon el pasado miércoles en Múnich. El portero falló en el segundo gol del Bayern. No logró detener un remate lejano de Sané. No era la primera vez que se comía un gol y en el Barça contemplan la posibilidad de poner a Ter Stegen en el mercado.

Juanmi bate a Ter Stegen en el gol del Betis que derrotó al Barça en el Camp Nou / EFE



Juanmi bate a Ter Stegen en el Barça-Betis de esta temporada / EFE

Posible venta

Xavi, de momento, sigue respetando la jerarquía de Ter Stegen. Todavía no cuestiona su titularidad. En el Barça, sin embargo, creen que podrían alivar su delicada situación económica con su venta. En los despachos del Camp Nou aseguran que podrían ingresar 50 millones de euros por él.

El Barça también tiene a Neto e Iñaki Peña, un portero joven con mucha proyección que acusa la falta de minutos. De momento, Ter Stegen es un obstáculo para ellos, pero el alemán ya no es el muro infranqueable de otros años. Desde que se lesionó, no es el mismo.