El FC Barcelona consiguió, en la jornada 15 de la Liga, una de sus victorias más sufridas en los últimos años. El equipo azulgrana salió airoso (1-3) del tremendo despliegue del Villarreal, a tal punto que hubo mucha incertidumbre en los minutos finales hasta el gol anotado por Memphis Depay. Esas complicaciones las sufrieron enormemente la línea defensiva, especialmente Gerard Piqué y Óscar Mingueza, que salieron en la fotografía del único tanto anotado por el submarino amarillo.
Bajo la lupa
La intensa presión del conjunto de Unai Emery supuso un enorme problema para los defensores culés, que no lograron salir en muchas ocasiones con el balón jugado. Eso provocó un montón de pérdidas en zonas peligrosas, que posteriormente fueron castigadas por los delanteros rivales. De esa forma es que llegó el empate parcial (1-1) en la segunda mitad, en donde estuvieron como protagonistas los canteranos anteriormente mencionados.
El error inicial es de Gerard Piqué, que llega totalmente a destiempo a la marca de Arnaut Danjuma. Ese fallo en el timing permite que el neerlandés pueda hacer contacto con el esférico y mandar el pase hacia la zona que, posteriormente, atacó Chukwueze. El nigeriano llegó cómodo al remate, debido a que Óscar Mingueza no fue capaz de igualar la velocidad del delantero en esa carrera al espacio; sin embargo, hay que tomar en consideración que el polivalente jugador azulgrana estuvo en un perfil incómodo tras entrar en la segunda parte como lateral izquierdo.
Samu Chukwueze, el goleador del Villarreal ante el Barça / EFE
Indudablemente que la noche de Piqué no fue para nada sencilla. Es evidente que no tiene la misma rapidez para molestar a los defensas durante sus apoyos. Si demuestra que todavía tiene talento al defender dentro del área, siendo en esa zona uno de los centrales más contundentes en los últimos años, pero la realidad es que está mostrando mucha inseguridad cuando debe salir lejos de ese espacio en concreto.