Xavi Hernández escribió una de las mejores páginas de la historia del Barça como futbolista. Solo le supera Leo Messi en partidos jugados. En 17 años en el primer equipo, ganó ocho veces la Liga y cuatro de las cinco Champions que tiene el club en su currículo. Pero la historia de Xavi comenzó antes de su ascenso al primer equipo. En las categorías inferiores ya destacaba. Y Louis van Gaal, técnico exigente donde las haya, alucinaba con él.
Van Gaal apostó fuerte por Xavi y Xavi, agradecido, le salvó la cabeza al técnico neerlandés en Valladolid. Sus inicios en el Barça no fueron fáciles, a la sombra de Pep Guardiola, porque el actual entrenador azulgrana comenzó como mediocentro.
Muy bromista
Xavi siempre fue un tipo discreto, al menos públicamente, pero también muy bromista. Muy pícaro. Y uno de sus mejores amigos fue Gabri, formado también en las categorías inferiores del Barça. Entre ambos había muy buena sintonía y complicidad. Y las bromas estaban a la orden del día.
Dani Alves y Xavi juntos en un partido como jugadores del Barcelona / EFE
Xavi y Alves, en su etapa de futbolistas en el Barça / ARCHIVO
En el vestuario del Barça Xavi se fue lanzando. Poco a poco. Y sorprendió que siempre utilizaba la expresión máquina para referirse a sus compañeros. Cuando algo iba bien, todos eran máquinas. Pero un día muchos alucinaron cuando escucharon que le llamaban Pelopo. ¿Pelopo? ¿Qué significaba eso? Más de uno sonrió cuando se enteró del motivo de dicha expresión. A Xavi le llamaban Pelopo, sobre todo su amigo Gabri, por "pelo en la p...". Y ahí comenzó el nuevo mote de Xavi, conocido por todos sus compañeros y periodistas.
Vuelve cinco años después
Las bromas, obviamente, eran inevitables cuando el Barça ganaba un título de prestigio. Los gritos de Pelopo, Pelopo podían oírse en el vestuario. Hoy, cinco años después de finiquitar su etapa como futbolista en el Camp Nou, el Pelopo ha vuelto para rescatar a un equipo muy tocado.