Xavi ha venido a tomar decisiones. Y no solo deportivas, donde tendrá que centrar la mayor parte de sus esfuerzos. El catalán aterriza procediente de Doha con una idea muy clara en la cabeza. Quiere a su gente de confianza, pero por encima de todo desea reestructurar los servicios médicos del club. En su cabeza está Ricard Pruna, antiguo jefe médico del Barça durante 25 años y reconocido como uno de los mejores en su profesión.
Mateu Alemany le ha trasladado a la leyenda culé que tiene plenos poderes para realizar ese cambio. La junta directiva también está preocupada por las lesiones que están debilitando a la plantilla desde principio de temporada. Los casos de Pedri o Dembelé, los dos más inexplicables.
Óscar Hernández y seis más
El hermano de Xavi está totalmente involucrado en la dinámica de segundo entrenador. Sergio Alegre es la otra persona que trabaja mano a mano con él y Óscar. El preparador físico será Iván Torres, el fisio Carles Nogueuria y los scouters David Prats, Toni Lobo y Sergio García.
Sergio Alegre, Xavi Hernández y Óscar Hernández, en un partido del Al Sadd / EFE
Una limpieza profunda del nuevo técnico buscando la revolución que se necesita. Todos ellos trabajaban en Doha con el Al-Sadd, pero algunos se quedarán fuera. Por ejemplo, Xavi Ferrando no sustituirá a José Ramón de la Fuente como entrenador de porteros. Mario Jiménez, readaptador físico, tampoco embarcará en esta nueva aventura.
Fichaje en enero
Una de las claves para Xavi es abrir el campo con los extremos. Es un apasionado de los extremos puros, como Dembelé. Uno de los motivos por los que el Barça volverá a la carga con su renovación es por la fe que tiene en el futbolista francés. Un jugador que no quiere renovar, pero que comenzará a interesarse por la propuesta si le seduce la idea de Xavi.
Dembelé controla el balón en el Dinamo Kiev-Barça / FCB
El próximo mercado de fichajes estará cargado de noticias. Laporta no quiere gastar dinero, aunque sabe que el equipo necesita refuerzos. Raheem Sterling gusta mucho a la directiva y al de Terrassa. La buena relación con Guardiola podría facilitar la llegada del inglés.