Parece que Ronald Koeman quiera hacer las maletas lo antes posible para marcharse de Barcelona. El técnico holandés no estuvo a la altura en su regreso al estadio de Da Luz, donde el Barça sufrió otra dolorosa derrota europea (3-0). Desnudó al equipo con sus movimientos tácticos y lo acabó condenando con la complicidad de varios jugadores que están más fuera que dentro. Tras un nuevo ridículo en Champions, el Barça se complica la vida en la competición más glamurosa y Koeman cava su propia tumba ante un presidente, Joan Laporta, que sigue buscando entrenador.
Alineación Barça: Ter Stegen; Sergi Roberto, Araujo, Piqué, Éric, Dest; Busquets, De Jong, Pedri;, Luuk de Jong y Memphis Depay.
Alineación Benfica: Vlachodimos; Grimaldo, Vertonghen, Otamendi, Verissimo; Lázaro, Weigl, Joao Mario; Yaremchuk, Nuñez y Rafa Silva.
Gol en contra inicial
Decidió Koeman volver a al 3-5-2 que solo había utilizado contra el Bayern esta temporada, pero que le dio buenos resultados en la campaña anterior. Sin embargo,otra vez como en Granada, los jugadores prácticamente no se habían atado ni las botas y el equipo ya había recibido el primer mandoble. Parece tener problemas para entrar en los partidos el Barça.
En el minuto tres Darwin Nuñez se lanzó a la carrera a la espalda de Éric García al que envidó al pisar área, el uruguayo le sacó la cadena al central catalán con una bicicleta y disparó raso abajo al primer palo para batir a Ter Stegen que pudo hacer más. Alimenta este gol el ‘run-run’ que hay alrededor de Éric García y que dice que no está para ser el defensa titular del Barça.
Busquets partido ante el Benfica FCB
El equipo se activó a través de sus dos centrocampistas. Sobre todo de Frenkie de Jong que despabiló al equipo incombustible y omnipresente en todas las zonas del campo. También a través de Pedri que elevó la apuesta en el pase con sus envíos más profundos. En el minuto 16’ desnudó la defensa del Benfica con un pase al espacio para Frenkie que ante el portero decidió regalar el gol a su compatriota Luuk de Jong que cuando ya celebraba el gol vio como la defensa del Benfica sacaba el gol bajo palos.
Siguió intentándolo el equipo con más actitud que juego. Luuk volvió a probar suerte con un remate dentro del área al que llegó forzado y que se marchó cerca del poste izquierdo de Valdechimos. Memphis también se mostró voluntarioso pero la falta de la nitidez en la circulación del balón de su equipo desesperó al holandés. Estaba asentado en el terreno de juego el Barça cuando Koeman decidió, sorprendentemente, en el minuto 33 substituir al amonestado Pique por el joven Gavi.
Desconcertó todavía más el entrenador a todo el mundo cuando no rectificó el dibujo y retrasó a Frankie de Jong como tercer central. Le restó Koeman al equipo vigor y llegada eliminando de la ecuación de ataque a su jugador más destacado. El tedio se adueñó del equipo que se marchó a la media parte abajo en el marcador y desorientado por los movimientos de su entrenador.
Siegunda parte horrible
Empezó perezoso también la segunda parte el equipo que no supo meterse en el partido a pesar de ir por debajo en el marcador. Pareció ser el Benfica el que estaba por debajo en el marcador. Le perdonó la vida Darwin Nuñez, el delantero fue una pesadilla para la defensa azulgrana, cuando, en el minuto 57, ante una salida inexplicable y a destiempo de Ter Stegen casi hasta el medio del campo, disparó al poste con la portería sin guardián. Esquivó una bala el Barça.
Sergio Busquets ante el Benfica/EFE
Desaparecido Pedri, ocupado Frenkie en tareas defensivas, el equipo quedó a merced de los destellos de Depay que se encontró, de nuevo, aislado ante la inoperancia de Luuk. Ante la incapacidad del Barça, Koeman decidió hacer un triple cambio para meter en el campo a todos los jugones que le quedaban en el banco, Ansu Fati, Nico y Gavi inrgresaron al terreno de juego. Ni tiempo tuvieron los tres futbolistas a participar cuando Rafa Silva remato al fondo de la red del portero alemán un balon que había quedado sin dueño en el área y que había detenido Ter Stegen previamente.
La pesadilla continuó en el minuto 78 para los culés cuando el VAR le chivó a Orsato una mano de Dest en el área blaugrano. El ejecutor no pudo ser otro que Darwin Nuñez que engaño a Ter Stegen y definió con temple a la izquierda del portero alemán.
El final del partido fue un via crucis para el equipo. Eric García coronó su mal partido con una expulsión en el 87 ante la mirada resginada y de derrota de Koeman. El pitido final fue un alivio para el Barça que se marchó a vestuarios con dos derrotas seguidas en su casillero y último de su grupo. La última vez que el Barcelona perdió sus dos primeros partidos en la fase de grupos, cayó eliminado en 2001. El Barça también deberá remontar a este dato.