El Barça no gana para disgustos. Tan surrealista es la situación que vive el club que el Alejandro Balde, el jugador más joven sobre el terreno de juego, se tuvo que marchar substituido en el minuto 42 de la primera parte con claros gestos de dolor en la zona lumbar, como si de un veterano con ataque de ciática se tratara.
Una lista que no para de engordar
Cuando más necesitaba de sabia nueva, el Barça volvió a recibir un jarro de agua fría cuando Koeman ordenó el cambio del joven lateral izquierdo por Mingueza. El alcance de la lesión quedará a expensas de las pruebas que se le realicen mañana. La plaga de lesiones se cobró una nueva víctima que había sido de las pocas buenas noticias que la afición culé recibió tras el desastre ante el Bayern.
Balde se une de esta manera a la lista interminable de jugadores que se congregan en la enfemería: Martin Braitwhite, Ousmane Dembélé, Sergio Agüero, Jordi Alba, Pedri, Moussa Wagué. A estos nombres hay que unir al de Ansu Fati que pese a que ya no está lesionado, su rotura del menisco le ha tenido apartado ochos meses y le ha impedido debutar con el equipo esta temporada.
Alejandro Balde en una acción ante el Bayern / FCB
Ni siquiera las lesiones respetan a un equipo al que el juego, las sensaciones y la suerte han abandoando. Mucha prisa deberán darse los magullados en poder volver a estar disponibles para Koeman. El equipo ha demostrado no poder remontar situaciones adversas y la vitalidad de los jóvenes no sirve para sacar del atolladero a un equipo sin rumbo