Los últimos días del FC Barcelona no están siendo fáciles. El mercado de fichajes está cerca de finalizar y todavía no han conseguido desprenderse de los descartes más importantes de la plantilla. La primera traba apareció con la negativa de Samuel Umtiti para salir en el actual verano; ahora el problema surge con Miralem Pjanic, que todavía no encuentra un destino.
A pesar de que aparecieron cuatro equipos interesados en la Serie A, la situación ha venido complicándose con el pasar de la semana. Actualmente empiezan a dificultarse esas opciones que parecían factibles para sacar al mediocentro bosnio.
Miralem Pjanic, junto a varios de sus compañeros, en un entrenamiento reciente del Barça / FCB
Los equipos italianos
La intención de Pjanic era volver a su antiguo club, la Juventus de Turín. Sin embargo, las posibilidades económicas de los bianconero imposibilitan la posibilidad de incorporar al jugador. Es importante mencionar que dicho conjunto fichó a Manuel Locatelli, el cual representa un perfil similar al del azulgrana.
Por otra parte, tenemos el caso de la Fiorentina. Hubo acercamientos y buena disposición entre ambas directivas, pero finalmente se decantaron por fichar a Lucas Torreira. El uruguayo, que proviene del Arsenal, ocupa ese lugar en la zona medular que, en teoría, estaba destinado para el bosnio.
También está la Roma de José Mourinho. Los romanistas ven con buenos ojos la idea de comprar a un mediocentro con experiencia. La directiva de Laporta está dispuesta a hacerse cargo de parte del salario para que el futbolista pueda regresar al fútbol italiano. No obstante, el panorama no es tan fácil, especialmente porque las últimas informaciones indican que dicho conjunto tiene en la mira a Héctor Herrera. Así que podría ver otra disputa entre jugadores.
Miralem Pjanic ha puesto de su parte y quiere facilitar su salida del Barça / EFE
Por último, el Napolés. El equipo que actualmente dirige Luciano Spalletti estaría seriamente interesado en fichar a Miralem Pjanic. Ambos se conocen cuando coincidieron en la Roma hace algunos años. Es el destino que cobra mayor fuerza de todos los que estuvieron involucrados hasta la fecha. Los días pasan y todo dependerá de los napolitanos para que el Barça pueda afrontar la temporada 2021-22 sin preocuparse por la presencia del medicentro.