En el primer amistoso del curso, con apenas un par de semanas de entrenamientos en las piernas, el nuevo Barça de Ronald Koeman se estrenó sobre el césped del Estadio Johan Cruyff.

El técnico holandés puso, de inicio, todas las piezas del primer equipo con las que cuenta, a falta de que se incorporen los internacionales que siguen de vaciones o están disputando los Juegos Olímpicos.

Un once inicial con varios señalados por Koeman para salir del club (Umtiti, Pjanic), un par de fijos (Piqué, Sergiño Dest) y otros tres cuyo futuro sigue en el aire (Neto, Sergi Roberto, Riqui Puig), aunque cada vez cuenten con más papeletas para seguir según avanzan las semanas. 

Riqui Puig en una acción en el amistoso de pretemporada ante el Nàstic / FCB

Riqui Puig en una acción en el amistoso de pretemporada ante el Nàstic / FCB

El mejor de la medular

El último de los mencionados, Riqui Puig, parece empeñado en demostrar al staff técnico comandado por el holandés que su sitio sigue siendo el Barça. Contra el Nàstic, el canterano salió de inicio con ganas y muy activo en las combinaciones. 

Desde que el balón empezó a rodar Riqui dirigió las acciones ofensivas de los blaugrana y a los pocos minutos ya había filtrado un gran pase a Yusuf Demir, otro de los destacados de este primer amistoso del año. El peso del centrocampista de Matadapera se vio en el minuto 39. Un robo suyo provocó la dura entrada de Quintilla y su expulsión por roja directa, decantando así el partido y provocando una desigualdad en el campo que no acabó de gustar a Koeman.

Riqui, por su lado, siguió a lo suyo hasta su substitución en el descanso. Ordenando al equipo con el balón e incidiendo con la conducción y el pase, una y otra vez, sobre la débil defensa tarragonina. 

La insistencia de Riqui

El mediocampista de 21 años, de nuevo, está ante una encrucijada. Él quiere seguir como sea en el club de sus sueños, pero la pelota está sobre el tejado de Koeman, que parece que no moverá un dedo si finalmente se concreta alguna de las ofertas de clubes de la Liga que fantasean con reclutarle

Koeman dirigiendo al Barça contra el Nàstic / FC Barcelona

Koeman dirigiendo al Barça contra el Nàstic / FC Barcelona

 

La insistencia de Riqui, todo hay que decirlo, es encomiable. El canterano debutó con el primer equipo allá por abril de 2019, con Ernesto Valverde en el banquillo. En aquel momento parecía que su sitio (y la adquisición de protagonismo en el juego y los minutos) en el primer equipo era cuestión de meses, pero ni el Txingurri, ni Quique Setién -aunque el cántabro ha sido probablemente el técnico que más ha apostado por él-, ni ahora Koeman han terminado por darle una cierta continuidad al jugador. 

En esta pretemporada, otra vez, Riqui llama a la puerta. Veremos si Koeman está dispuesta a abrirla.