Con la pretemporada ya en marcha, la primera plantilla del Barça irá incorporando efectivos en las próximas semanas. Desde este martes los internacionales de Holanda (Depay y De Jong) y Francia (Griezmann y Lenglet) ya están a las órdenes de Ronald Koeman.
Entre los últimos en hacerlo estará Sergio Busquets, que terminó su participación en la pasada Eurocopa con España el 6 de Julio. Está previsto que, al igual que otros compañeros, Busi disfrute de hasta tres semanas de vacaciones, por lo que su vuelta a la disciplina culé se producirá a mitad de la próxima semana.
También en los próximos días el Barça tiene en la agenda varias reuniones sobre uno de los temas más acuciantes para el club: la renegociación salarial de los jugadores con fichas más altas.
Busquets, junto a Frenkie de Jong, en un entrenamiento de la temporada pasada / FCB
Reunión con su agente
Entre estos últimos figura Busquets. Aunque todavía no hay fecha definida se da por hecho que su representante Josep Maria Orobitg se reunirá en la próxima semana con los negociadores blaugranas, encabezados por Mateu Alemany. El encuentro podría incluso producirse antes de la incorporación del jugador a los entrenamientos.
El centrocampista de Badia tiene contrato hasta junio de 2023 y en él se establece un salario en progresión, de menos a más, según lo acordado en su última renovación -ya condicionada por la mala situación financiera de la institución-. Pero Busquets habrá de apretarse el cinturón todavía un poco más.
El capitán quiere poner todas las facilidades, pero también hacer valer su postura como un jugador veterano que, tal y como demostró en la Eurocopa, puede seguir rindiendo al máximo nivel. Por ello, su idea es que si la reunión entre su agente y el Barça no fructifica, sea él mismo quien intervenga en las conversaciones.
Sergio Busquets, en el partido de España contra Suiza de los cuartos de final de la Euro / EFE
Predisposición por ambas partes
Con todo, a día de hoy parece difícil que club y jugador no alcancen un acuerdo. La predisposición por parte del jugador es total: su objetivo es disfrutar de sus últimos años a máximo nivel en el club de su vida. Y en el área deportiva del Barça, por su parte, se ha llegado a la conclusión de que en la actualidad no existe ni en la cantera ni en el mercado un substituto de garantías para Busi.
Desde las oficinas del Camp Nou hay varios frentes abiertos en relación al centro del campo blaugrana, pero se confía que la carpeta Busquets sea una de las que menos dolor de cabeza genere.