De la temporada se pueden extraer muchas conclusiones del primer equipo del FC Barcelona. Pero la más significativa es de índole negativa, ya que la línea defensiva ha mostrado debilidad durante todo el campeonato. Por lo tanto, sería en lo que Mateu Alemany tiene pensado incidir más rápido en la manera de lo posible.
Es por eso que los defensas del club y, sobre todo, los centrales están en el punto de mira del cuerpo técnico. Si tenemos en cuenta los datos del Barça en La Liga, es cierto que se han marcado muchos goles con un total de 85 tantos. Sin embargo, los datos contrastan negativamente con los goles encajados: 38. Diez más que el Real Madrid y trece más que el vigente campeón, el Atlético de Madrid.
Umtiti, un problema que viene de lejos
El central francés del Barça no es el que era. Los números no mienten y más desde que apostó más por su selección que por el club. Apenas ha jugado este año y el protagonismo es nulo. Ronald Koeman ha contado con Samuel en muy pocas ocasiones y con muy pocos y malos resultados. Es por eso que Mateu Alemany lo quiere fuera del club, al contrario de la opinión del jugador.
Umtiti, con el Barça / EFE
Su elevada ficha de doce millones de euros brutos le hace casi imposible tener pretendientes para un posible traspaso. Lo más fácil sería concederle la carta de libertad pero el club no se rinde ante esta situación e intentará sacarle un mínimo rendimiento económico por él.
Clement Lenglet, en la cuerda floja
El otro central francés de Can Barça cuyas posibilidades de marcharse son altas es Lenglet, a pesar de que el año pasado fue renovado hasta 2026 por la anterior junta directiva de la mano de Josep Maria Bartomeu.
El overbooking de centrales en el club hace que todas las miradas vayan hacia Lenglet. Siendo una operación más fácil que la de Umtiti, su elevada ficha no ayudará al club a encontrarle un destino bueno para ambas partes.
Lenglet, en un partido del Barça / EFE
Tanto Mateu Alemany y Ronald Koeman verían con buenos ojos la decisión de que el central, con actuaciones que dejan mucho que desear, se marchara del equipo, ya que la apuesta de la dirección es luchar por tener una plantilla joven.
Los jóvenes, al alza
Si se hace hincapié en el número de defensas del equipo, los datos son abrumadores. La razón es la siguiente: el Barça empezó la temporada pasada con solamente cuatro centrales, mientras que en estos momentos hay disponibles seis. Todo ello sin contar con los laterales defensivos.
El club tiene la opinión certera de que se consideran clave Araujo, Mingueza y Eric García. Son jugadores jóvenes y, sobre todo, de la cantera. El filial, por alguna razón o por otra, está en auge, ya que el míster se vio forzado a apostar por ellos la temporada pasada de manera satisfactoria.
Así que Mateu Alemany, director de fútbol del primer equipo, tendrá que tomar decisiones de cara a la próxima temporada.