Ronald Koeman, con pie y medio fuera del FC Barcelona. El preparador neerlandés parecía tener la continuidad asegurada tras el triunfo en la Copa del Rey, pero el equipo azulgrana ha cuajado un final de temporada desastroso y el héroe de Wembley queda señalado como uno de los grandes culpables.
El conjunto catalán llegó a depender de sí mismo para ganar la Liga, pero la derrota contra el Granada le arrebató esa posibilidad. Luego llegaron los empates ante Atlético y Levante y, finalmente, el revés frente al Celta. El Barça visitará Ipurúa el próximo sábado, pero ya sin opciones de nada en Liga y con el barcelonismo más pendiente del futuro de Koeman que del choque con el Eibar.
El sistema
Hay muchos motivos que pueden llevar al héroe de Wembley a ser despedido del FC Barcelona. Uno de ellos es la insistencia por el 3-5-2. Es un sistema que funcionó a lo largo del mes de marzo y en las primeras semanas de abril, pero hace tiempo que ha dejado de ser efectivo. Koeman, en cambio, sigue apostando por él.
Koeman lamentando el gol del Celta / EFE
Además, los rivales le tienen tomada la medida. Real Valladolid y Valencia hicieron sufrir a los culés copiando su sistema, el Atlético logró un empate y el Granada se marchó con la victoria. Levante y Celta, si bien mantuvieron su esquema habitual, supieron cómo frenar a los carrileros, cortocircuitar el juego y hacer daño a la defensa de tres centrales.
Vuelta al 4-3-3
Joan Laporta, aconsejado por sus asesores, considera que el FC Barcelona debe volver al 4-3-3 para triunfar de nuevo. Fundamentalmente porque es el sistema con el que se trabaja con todos los futbolistas de las categorías inferiores, de forma que si el primer equipo juega con 4-3-3 la transición es más sencilla para ellos.
Joan Laporta sigue sumando nombres a su lista / EFE
Es algo que ejemplifican como nadie Riqui Puig y Carles Aleñá. Son dos interiores puros que explotan todas sus virtudes con el 4-3-3. Ni el 4-2-3-1 que probó al inicio Koeman ni el 3-5-2 de los últimos meses se ajustan a sus características. Y por eso han tenido tan poco protagonismo esta temporada.
El sistema de tres centrales ha quedado obsoleto y ha dejado de funcionar al FC Barcelona. La insistencia de Koeman con el esquema es uno de los muchos motivos que le dejan con pie y medio fuera del FC Barcelona.