¡Adiós a la Liga! El Barça de Koeman no pudo pasar del empate ante el Levante en el Ciutat de Valencia (3-3) y pierde prácticamente todas las opciones que le quedaban para luchar por el título. Tras una notable primera mitad, los culés cayeron en el conformismo en la segunda hasta desperdiciar una ventaja de dos goles. Encuentro tétrico de un Barcelona que dimite definitivamente del título.
Messi y Pedri dan ventaja al Barça
El Barça de Koeman viajó al Ciutat de Valencia con el objetivo de romper una racha de dos batacazos consecutivos y meter presión al Atlético y Real Madrid en la lucha por el campeonato. En este sentido, el técnico holandés decidió cambiar su estrategia para evitar los errores de pasado, y apostar por un once ofensivo, con Dembelé como carrilero, junto a Griezmann y Messi como referencias.
En este sentido, los blaugrana llevaron el peso del juego desde el primer instante y no tardaron en tener las primeras aproximaciones, ante un Levante que no se jugaba más que el honor. El cuadro culé se quería evitar el sufrimiento, y es por eso que se lanzó con ímpetu a por la portería de Aitor Fernández desde el saque inicial.
Los jugadores del Barça, celebrando un gol ante el Levante | EFE
Pedri fue el primero en avisar, pero el Barcelona necesitó de la aparición del de siempre, Leo Messi, para ponerse por delante. El argentino, que toca con los dedos su octavo pichichi, definió a la perfección un centro de Jordi Alba. Y pocos minutos después, Pedri multiplicó la ventaja tras una tremenda asistencia de Dembelé, que le dejó el gol en bandeja.
Se confirma la tragedia
El encuentro parecía teóricamente sentenciado al descanso. No obstante, el Barça volvió a caer en el camino del conformismo, y los granotas lo aprovecharon para empatar el encuentro en menos de tres minutos. Primero fue Melero el que recortó distancias, y Morales puso las tablas al aprovechar un error de Messi.
Dos tantos que metieron el miedo en el cuerpo a los culés, que veían como se les escapaba el título. Un susto que duró poco más de cinco minutos, lo que tardó Dembelé, uno de los mejores de los de Koeman, en adelantar de nuevo a los visitantes al aprovechar una acción embarullada.
Sergio León, celebrando un gol ante el Barça | EFE
No obstante, de nuevo el Barcelona volvió a pecar de transigente, fruto también del cansancio. Se limitaron a defender el resultado, y no de sentenciar el encuentro. Mientras, el Levante se aproximaba cada vez con más peligro a Ter Stegen. Se olía la tragedia. Y se confirmó con el gol de Sergio León a pocos minutos para el final.
Koeman puso a todos sus atacantes en el terreno de juego. Sin embargo, esta vez la épica no se alineó con el cuadro blaugrana, que dice adiós a la Liga. Solo un milagro permitiría a los blaugrana regresar a la vida. No obstante, ante el Levante demostraron que ni merecen, ni tienen ya fuerzas para luchar por el campeonato.