Antoine Griezmann es una de las mejores noticias del FC Barcelona en el tramo final de temporada. El francés marcó un doblete contra el Villarreal y asistió a Leo Messi en una acción de gran talento dejaba al capitán solo dentro del área para abrir la lata contra el Granada. Poco a poco va ganando confianza.
Con este gol contra los andaluces ya son seis los tantos de conexión directa entre los dos delanteros. El ex del Atlético de Madrid es el jugador que más ha asistido al 10 en partido oficial, un total de cinco asistencias. Al revés, directamente, el argentino solamente le ha dado un tanto al galo.
El mejor asistente de Griezmann no es otro que Jordi Alba, también aliado de Messi en los últimos metros del terreno de juego. La jugada ya es un clásico: apertura del capitán a la banda izquierda, llegada a línea de fondo, pase hacia atrás y entrada del delantero desde segunda línea.
Messi y Griezmann abrazándose tras el gol contra el Granada / FC Barcelona
Pese a todos los rumores de su mala relación, la conexión francoargentina cada vez es mejor. Se buscan, se asocian y se empiezan a entender sobre el césped. Significativo fue el abrazo entre los dos en el primer gol contra el Granada. Cuando se agrupa talento en la mediapunta, suceden estas acciones.
52 goles y 26 asistencias
Leo Messi es el Pichichi de la Liga y uno de los máximos goleadores de Europa. En lo que llevamos de curso ha marcado 34 goles y ha repartido 14 asistencias en 43 partidos oficiales. Sale a un gol por cada 112 minutos y ni su edad ni las incógnitas de su futuro pueden con su buen rendimiento de cara a gol.
Por parte de Griezmann, en las últimas semanas está viendo portería con cierta facilidad. Ha marcado ya 18 dianas en todas las competiciones en 46 partidos y ha repartido 12 asistencias. Ha aprovechado a la perfección la baja por pubalgia de Ousmane Dembelé para asumir responsabilidades.
Antoine Griezmann en una acción contra el Villarreal / FCB
Entre ambos suman 52 goles y 26 asistencias, seis de las cuales repartidas entre ellos. Quedan cinco partidos para finalizar la temporada y, si los culés quieren tener opciones de título, es más necesario que nunca que se mantenga esta buena conexión.