Ronald Koeman apostó por un once con dos sorpresas, teniendo en cuenta los visto en los últimos partidos, para enfrentarse al Athletic Club en la final de la Copa del Rey. Regresaba Gerard Piqué al once y había cambio de delantero: Ousmane Dembelé se quedaba en el banquillo y entraba en su lugar Antoine Griezmann.
El extremo francés venía siendo titular en los últimos partidos ocupando la posición del centro de la zaga. Contra el Real Madrid, su rendimiento no fue el mejor. Ante defensas cerradas sufre demasiado por la falta de espacios, pues es un jugador que vive de la explosividad de sus acciones y los regates.
Dembelé en una acción contra el Valladolid / FC Barcelona
Dembelé en una acción contra el Valladolid / FC Barcelona
El entrenador neerlandés, conocedor del sistema defensivo de Marcelino García Toral y su 4-4-2 habitual, apostó por Griezmann como acompañante de Leo Messi. Se necesitaba talento y combinación y el ex del Atlético de Madrid está un paso por delante en este sentido que El Mosquito.
¿Problemas físicos?
El motivo táctico es uno de los que podrían explicar la suplencia de Ousmane Dembelé en la final copera pero no el único. Pero también puede haber uno médico. Según se informó durante la semana, el francés sufría alguna molestia física. Concretamente problemas en el pubis, que le han hecho terminar los últimos encuentros con molestias.
Entró en la convocatoria como si nada, pero fue dura hasta última hora. Los servicios médicos apostaron por un tratamiento conservador, que dio buen resultado, pero no acabó con todos los problemas. El jugador insistió en llegar y tuvo minutos en la segunda parte.
Mingueza, Dembelé y Messi en un entrenamiento / FC Barcelona
Mingueza, Dembelé y Messi en un entrenamiento / FC Barcelona
Viendo la importancia que ha tenido Dembelé esta temporada no deja de sorprender ver como entró en el minuto 88, en el último ciclo de cambios. Entró por Griezmann, un cambio habitual entre delanteros que se suele producir mucho antes que cerca del minuto 90.
Pendiente del Getafe
El próximo jueves saldremos de dudas. El Mosquito tiene cuatro días para seguir con su plan de recuperación para la molesta lesión del pubis y prepararse para el choque contra el Getafe. Los culés reciben en el Camp Nou a los madrileños en la primera de las ocho finales restantes de la Liga.