La dirección deportiva del FC Barcelona ya trabaja en la confección de la plantilla de la próxima temporada. La Liga y la Copa del Rey todavía están en juego, pero la secretaría técnica piensa más allá. Es fundamental encarrilar las incorporaciones cuanto antes para anticiparse al resto de clubes.
El fichaje de Éric García es uno de los objetivos de la entidad desde hace tiempo. El contrato del central con el Manchester City expira el 30 de junio y quiere volver a la que fue su casa. El regreso, por lo tanto, parece cuestión de tiempo, aunque las negociaciones entre ambas partes se complicaron este miércoles.
Oferta a la baja
Mateu Alemany, nuevo director de fútbol del club, y Ramon Planes, secretario técnico, se reunieron con Iván de la Peña, representante del central catalán. Los emisarios del FC Barcelona recalcaron la mala situación económica que atraviesa la institución y presentaron una oferta a la baja al futbolista.
Éric García, en un calentamiento con el City | EFE
La entidad ha pasado de ofrecerle cinco temporadas a cuatro, de forma que Éric quedaría ligado al Barça hasta el 30 de junio de 2025. Además, las cantidades fijas del salario han mermado respecto al acuerdo verbal al que llegaron los representantes y Carles Tusquets, presidente de la comisión gestora, el pasado mes de enero.
Las dos partes están buscando fórmulas para diferir el sueldo del zaguero, de forma que el todavía jugador del Manchester City no pierda demasiado respecto a lo que pactó hace meses. Insistiendo en todo momento, eso sí, en que la situación económica es peor de lo que se esperaba y que el FC Barcelona debe amoldarse al límite salarial que marca la Liga.
¿Castigo?
Cabe recordar que Joan Laporta fue el único de los tres candidatos que se opuso a cerrar el fichaje de Éric García en enero. Víctor Font era partidario de incorporarlo cuanto antes, mientras Toni Freixa quería concretar su incorporación de cara al verano. El abogado catalán, sin embargo, era partidario de esperar.
Joan Laporta y Mateu Alemany / EFE
En ese momento, el ahora presidente del FC Barcelona expresó públicamente lo poco urgente que consideraba la incorporación de Éric García: "Si un jugador quiere ir al Barça, tiene que demostrarlo, y si en junio vendría gratis me cuesta entender por qué tendríamos que regalar dinero a un club competidor.
Aunque está claro que Laporta es partidario del fichaje de Éric, también parece innegable que le castiga por haberse ido del Barça cuando era cadete. No va a cometer ninguna locura por un futbolista que fue desleal al club cuando tenía 16 años. Si quiere volver, también deberá poner de su parte.