Uno de los elementos recurrentes en la Liga durante los últimos años han sido los enfrentamientos entre Gerard Piqué y Sergio Ramos, compañeros de selección, pero rivales en los duelos entre FC Barcelona y Real Madrid. Este sábado, por primera vez en 16 años, cabe la posibilidad de que ninguno de los dos esté en el clásico de Valdebebas.
El central catalán está recuperándose de la lesión en la rodilla que sufrió en la vuelta de semifinales de la Copa del Rey contra el Sevilla y, aunque Ronald Koeman no descartó que salga de inicio, está prácticamente descartado. Por parte del andaluz, su baja está confirmada: se lesionó muscularmente con la Roja ante Kosovo. Estará alejado de los terrenos de juego todo el mes de abril.
Tenemos que remontarnos al clásico del 10 de abril de 2005 --fecha que se repite esta temporada-- para encontrar el último partido en que ni Piqué ni Ramos estuvieron presentes. Fue en el Santiago Bernabéu con una derrota culé por 4-2 y con protagonsitas como Zidane, Ronaldinho, Ronaldo o Eto’o.
Ramos no se pierde la cita
Sergio Ramos llegó al Santiago Bernabéu procedente del Sevilla en verano de 2005. Desde entonces ha disputado 45 de 47 clásicos, siempre de titular. Tiene así el récord de futbolista que más veces ha jugado un Barça-Real Madrid. Este sábado será el primero que se pierde en Liga.
Sergio Ramos al final del encuentro entre Real Madrid y Barça / EFE
Hasta la fecha, el camero solamente se ha perdido dos clásicos: por sanción. El primero fue en la Champions League 2010-11, que se llevaron los de Pep Guardiola. Vio amarilla en el 0-2 de la ida y se quedó en Madrid en el 1-1 de la vuelta. La última ocurrió dos años más tarde en Copa del Rey. La ida de semifinales también terminó en empate a uno, pero después los blancos se llevaron la vuelta (1-3).
Piqué, cuatro veces sin clásico
Gerard Piqué ha disputado 37 de los 41 clásicos que se han jugado desde que fichó por el Barça procedente del Manchester United en verano de 2008. Este fin de semana puede ser la quinta cita que se pierda contra el eterno rival. La primera fue nada más aterrizar, en diciembre de 2008, cuando aún no era titular. Se quedó en el banquillo mientras sus compañeros se llevaban los tres puntos (2-0). La dupla titular era todavía Puyol-Márquez.
También se quedó en el banquillo en uno de los cuatro clásicos seguidos de 2012. El Barça perdió 1-2 contra el Madrid de Mourinho con la mente puesta en la Champions. Mascherano ocupó el lugar del 3. Por lesión, se quedó en la grada durante el empate a dos del mes de octubre de 2012. Tito Vilanova no pudo contar tampoco con Puyol.
Gerard Piqué celebra un gol al Real Madrid el curso pasado / EFE
El último clásico que se perdió Piqué fue por una contusión en la pierna derecha sufrida en abril de 2014. Chocó con Diego Costa y estuvo cuatro semanas de baja. Fue la final de Copa del Rey de 2014 donde se produjo el famoso tanto en que Bale deja retratado a Marc Bartra. Desde entonces, el de Sarrià es un fijo en los onces iniciales de los clásicos.