Los cinco señalados de Koeman para ganar el Barça-Valladolid
El entrenador movió el banquillo para lograr el tan buscado gol
6 abril, 2021 10:04Ronald Koeman tuvo que intervenir contra el Real Valladolid (1-0) para cambiar el rumbo del partido. Los culés necesitaban la victoria obligatoriamente para meter más presión al Atlético de Madrid, al líder de la Liga. Al final, el balón terminó entrando. Fue Ousmane Dembelé quien abrió la lata del partido en el minuto 90.
Rara vez el FC Barcelona agota los cinco cambios. Este lunes sí que se hizo. El equipo no estaba jugando de manera fluida y el cuerpo técnico intervino para desatascar el encuentro. Sin ir más lejos, del 3-4-3 se pasó al 4-3-3 tras el descanso y se terminó con un 4-2-3-1 mucho más ofensivo.
Triple cambio
Koeman movió el banquillo por primera vez en el minuto 63 y lo hizo por partida triple. Salían del campo tres de los jugadores que más incómodos estaban. Óscar Mingueza, con amarilla y en defensa de dos, Sergio Busquets y Antoine Griezmann. El centrocampista estuvo impreciso y se vio superado cuando los visitantes salían al contrataque.
Sergio Busquets en una acción contra el Valladolid / FC Barcelona
Por parte del delantero francés, tuvo el gol en su cabeza tras un rechace de Masip a disparo de Dembelé. Salió desviado cerca del palo. A parte de esta ocasión, su paso por el partido fue intrascendente. Ubicado en la izquierda, volvió a tener un juego plano y nada decisivo. Entró en su lugar Francisco Trincao, así como Ronald Araujo y Martin Braithwaite.
Con estas entradas, el equipo pasó al 4-2-3-1. Messi ocupaba la mediapunta del ataque, mientras que Dembelé pasaba de derecha a izquierda. Su banda la ocupaba el joven portugués y como referencia ofensiva el danés, un perfil menos asociativo y más rematador que El Principito.
Fatigados
El penúltimo cambio del partido fue Pedri González, que abandonó el campo en el minuto 77 para dar entrada a Ilaix Moriba. El canterano reforzaba así el doble pivote con músculo, mientras el canario mostraba claros síntomas de fatiga. Tras una primera parte muy activo, bajó el nivel en la segunda cuando los espacios se redujeron.
Pedri en una acción contra el Valladolid / FC Barcelona
La última sustitución se dio en el minuto 87. Sergiño Dest, que apenas consiguió regatear a su marcador, Nacho, era el elegido. Entró Riqui Puig a la mediapunta y Francisco Trincao pasó al carril derecho, buscando la profundidad y los centros laterales. El Valladolid estaba cerrado en su campo y se entraba en el acoso y derribo.
Falta de confianza
Casualidad o no, las cinco sustituciones por las que apostó Koeman --Griezmann, Busquets, Mingueza, Pedri y Dest-- son de los jugadores en los que menos confía el entrenador. Aunque titulares, son habituales en ser cambiados en las segundas partes, pues son menos decisivos en el resultado final que sus compañeros como Messi, De Jong o Dembelé.
Los cinco no firmaron un mal partido, pero sí que por fatiga, desgaste del Real Valladolid y condicionante de tarjeta --como es el caso de Óscar-- fueron los elegidos. El Barça necesitaba cambios, algo diferente a lo de la primera parte y lo encontró con los revulsivos y el cambio de sistema.