Y había gente que dudaba de él. Leo Messi dio la enésima exhibición de la temporada en la visita del FC Barcelona al Reale Arena. El delantero argentino lideró al equipo azulgrana con dos goles y una asistencia en la contundente victoria sobre la Real Sociedad. La jugada del primer gol también nació en sus pies.

El astro rosarino fue indetectable para la defensa del cuadro txuri-urdin. Hizo lo que quiso, cuando quiso y como quiso. Todas las acciones de peligro del Barça pasaron por sus pies. Pero más allá del elevado nivel futbolístico que ofreció, Messi también destacó por ejercer de capitán y estar siempre encima de sus compañeros.

Atento

Las mejores demostraciones fueron las celebraciones de sus dos goles. No fueron decisivos en el desarrollo del encuentro, pues fueron el cuarto y el último, pero igualmente se formó una piña muy efusiva alrededor de su figura. Estas imágenes eran más difíciles de ver en los primeros meses de la temporada.

Leo Messi y Riqui Puig celebran en Anoeta el sexto gol del Barça / FCB

Leo Messi y Riqui Puig celebran en Anoeta el sexto gol del Barça / FCB

Cuando acabó el encuentro se puso a abrazar a sus compañeros uno por uno, felicitándoles por su actuación y por la victoria del equipo. Siempre ha sido un líder deportivo, pero en los últimos años se le había pedido que fuera también el líder de puertas para adentro. Y esta temporada lo está siendo.

Lo de Anoeta simplemente fue la confirmación. Pero ya hace semanas que se le ve desempeñando el papel de capitán general. Lo hizo en la remontada contra el Sevilla, en la visita al Parque de los Príncipes y, en general, en todos los partidos de Liga Copa de los últimos meses.

Referente

En lo que también ha cambiado Messi es en el rol de guiar y ayudar a los jóvenes. El mejor ejemplo de ello es Pedri, con quien se entiende a las mil maravillas. Leo ha tendido la mano al centrocampista canario desde el primer día y ha sido fundamental en la adaptación del ex de Las Palmas al FC Barcelona.

Leo Messi celebrando el gol de Dest / FC Barcelona

Leo Messi celebrando el gol de Dest / FC Barcelona

Pedri es el caso más notable, pero no el único. Dest, Araujo, Mingueza, Ilaix Moriba e incluso Dembelé están bajo el cobijo del 10, que siempre trata de ayudarles. Y ni digamos Ansu Fati, con quien Messi también se entendía a la perfección y al que solo ha frenado la lesión que sufrió a mediados de octubre.

Fue muy criticado por su comportamiento en verano, pero no ha tardado en cambiar las críticas por elogios. Es evidente que, si el FC Barcelona gana algún título esta temporada, será, en gran parte, gracias a él.