La tecla que tocó Koeman para resucitar a Busquets

El cambio de sistema de Ronald Koeman para el FC Barcelona pasando del 4-3-3 al 3-5-2  le ha sentado muy bien al conjunto del equipo. En concreto, en los últimos encuentros se ha visto a un resucitado Sergio Busquets en el centro del campo.

El mediocentro ha resurgido de sus cenizas en una temporada en que todas las miradas críticas estaban puestas sobre él, e incluso algunos pedían su retirada del fútbol profesional. Pero, con el cambio de sistema, Busquets vuelve a ofrecer una buena versión de sí mismo con el Barça.

Busquets, Mingueza y Dembelé celebrando el gol del central ante el Huesca / FCB

Busquets, Mingueza y Dembelé celebrando el gol del central ante el Huesca / FCB

Con tres defensas por detrás de él, Koeman le ha dado un plus de libertad y tranquilidad a Busquets que le permite participar más en la creación y no sufrir tanto en las transiciones. El hecho de que Frenkie De Jong juege por detrás de él le da la vida. Además, tener más jugadores por dentro y cerca de su posición le ayuda mucho a sentirse más cómodo y no recorrer tantos kilómetros a sus 32 años.

Asistente en Anoeta

A pesar de que no se le vio muy a gusto en la primera parte en Anoeta, Sergio Busquets hizo un buen partido en la goleada del Barça a la Real Sociedad este domingo (1-6). En la segunda mitad dio un paso al frente y se puso a recuperar pelotas, algo que no había conseguido en los primeros 45 minutos.

Además, le puso un magnífico pase a Leo Messi para que el argentino marcara el cuarto gol del Barça y pusiera el primer tanto de su doblete en este encuentro (56’). En el 67’ fue sustituido por Ronald Araujo, ya que Koeman quería mantener el marcador y dar minutos al central uruguayo tras recuperarse de su lesión, lo que implicó adelantar a un De Jong sacrificado por el bien del equipo.

Los jugadores del Barça. celebrando un gol contra la Real Sociedad | EFE

Los jugadores del Barça. celebrando un gol contra la Real Sociedad | EFE

Pero lo cierto es que Busquets está despertando del letargo en el que estaba sumido este curso. El mediocampista catalán quiere demostrar que aún puede seguir aportando mucho al equipo y servir de guía para otros canteranos que se desempeñenan en su posición como Ilaix Moriba y Riqui Puig. Tiene contrato hasta 2023 y hará lo posible por cumplirlo en condiciones.