La lesión de Gerard Piqué fue la única mala noticia en la remontada del FC Barcelona contra el Sevilla. El central catalán se resintió de la rodilla derecha tras dar un pase y tuvo que ser atendido fuera del terreno de juego. Jugó los últimos minutos de la prórroga visiblemente cojo y dando pases con el pie izquierdo únicamente.

Las pruebas realizadas al futbolista han confirmado que tiene un esguince en el ligamento lateral interno de la rodilla derecha, la misma articulación donde sufrió la lesión que le mantuvo tres meses apartado de los terrenos de juego. El FC Barcelona no detalla el grado del esguince y se limita a explicar que "su evolución marcará su disponibilidad".

Dado que las primeras pruebas, realizadas tras el encuentro, descartaron una lesión de gravedad, lo más probable es que se trate de un esguince de primer grado. Piqué está descartado para el duelo contra Osasuna de este sábado y es seria duda para estar en París en la vuelta de octavos de final de la Champions League.

Héroe

El central catalán fue el héroe de la remontada del FC Barcelona contra el Sevilla. Cuando la eliminatoria parecía perdida, apareció él tras un centro soberbio de Griezmann para mandar el partido a la prórroga. Había vuelto hace tan solo dos semanas, algo que cuando se lesionó en el Wanda Metropolitano parecía improbable.

Los jugadores del Barça, celebrando el gol in extremis de Piqué contra el Sevilla | EFE

Los jugadores del Barça, celebrando el gol in extremis de Piqué contra el Sevilla | EFE

Por si le faltara épica al relato, la lesión que sufrió en la segunda mitad de la prórroga añadió todavía más. Los gestos de dolor eran evidentes y salió cojeando del terreno de juego. Para sorpresa de todos, pidió reincorporarse aunque no acababa de poder correr, andar ni pasar el balón con normalidad.

Se movió lo mínimo, pero saltó cuando tuvo que hacerlo y tocó el esférico cuando así lo pedía la jugada. La lesión era evidente, pero por suerte para el FC Barcelona y el jugador, todo parece haber quedado en un susto. Será baja este próximo fin de semana, un mal menor teniendo en cuenta las sensaciones que transmitía Piqué en la recta final del encuentro.