El Barça de Koeman desperdició una oportunidad de oro para meterse en la lucha por la Liga. Los culés no pasaron del empate contra el Cádiz (1-1) en un choque en el que al conjunto gaditano le salió a la perfección su plan. Los de Álvaro Cervera se limitaron a defenderse, y solo concedieron un gol de penalti a Messi.
Los blaugrana, pese a tener ocasiones, no multiplicaron su ventaja. Y en los últimos minutos, los visitantes cambiaron por completo el dibujo para lanzarse con todo a por el empate. Algo que consiguieron en los últimos instantes, después de un inocente penalti provocado por Lenglet. El Barcelona jugó con fuego, y acabó quemándose y complicándose su futuro en la Liga.
Messi y Pedri desencallan al Barça
Tras el batacazo del Atlético de Madrid, el Barça de Koeman estaba obligado a conseguir los tres puntos en la visita del Cádiz al Camp Nou para seguir aspirando a la Liga. Para ello, el técnico holandés dejó los experimentos en casa y dio una segunda oportunidad a los mismos once futbolistas que participaron en la debacle contra el PSG.
Una alineación de gala en un contexto completamente distinto. El Cádiz apostó desde el primer instante por limitarse a defender con todos los futbolistas cerca de su área, e intentar aprovechar sus opciones al contraataque. Un planteamiento que cortocircuitó por completo el juego blaugrana, incapaz de travesar la muralla defensiva de los gaditanos. Y es que además, esto coincidió con un Barça especialmente espeso en el movimiento de balón y con una evidente falta de ideas en los últimos metros.
Leo Messi, de penalti, adelantó al Barça contra el Cádiz | LaLiga
Unos 45 primeros minutos soporíferos y sin prácticamente ocasiones de gol, donde el cuadro catalán consiguió marcharse por delante en el marcador gracias al ímpetu de Pedri y la magia de Messi. El tinerfeño, el mejor de los locales en la primera mitad y el que más lo intentó, aprovechó el único error de comunicación de la zaga andaluza para provocar un claro penalti. Una opción que no desaprovechó el argentino, que superó a Ledesma con mucha calma en un pase a la red.
El Cádiz se convirtió en la víctima 38 del 10 blaugrana en Liga, justo el día en que superaba a Xavi como jugador con más partidos en Liga de la historia del Barça. El gol, la mejor noticia de un espeso Barcelona en la primera mitad.
Cuando juegas con fuego, te quemas
Tras el paso por los vestuarios, el guión no cambio. El Barça no puso una marcha más, mientras que el Cádiz continuó protegiéndose y tratando de que los culés no aumentasen su ventaja, para llegar vivo a los últimos minutos. Un plan de partido previsto por Álvaro Cervera, que a falta de 30 minutos, apostó por mover no solo el banquillo sino también el dibujo, para aumentar sus opciones en ataque.
En este contexto, los blaugrana se vieron con más opciones y más espacio en ataque, y se multiplicaron rápidamente las ocasiones. Griezmann y Dembelé tuvieron dos clarísimas, pero en el último segundo la defensa gaditana consiguió evitar el gol y mantener a su equipo en el partido.
Álex Fernández, celebrando su gol contra el Barça | LaLiga
El Barça jugó con fuego, y acabó quemándose. Desperdició ocasiones durante toda la segunda mitad, y lo pagó en los últimos instantes ante un Cádiz al que se salió a la perfección su planteamiento. Los visitantes, cayendo por la mínima, se lanzaron con todo a por el empate. Y lo consiguieron, en un penalti que anotó Álex Fernández tras una entrada de Lenglet.