Ronald Koeman sorprendió en la previa contra el Sevilla con una defensa del FC Barcelona inesperada. El teóricamente intocable, Clement Lenglet, se quedaba en el banquillo y salían de titulares en el eje de la zaga Samuel Umtiti y Óscar Mingueza. En el lateral derecho, a pierna cambiada, jugó Junior Firpo.
El protagonista del partido, como ya sucedió contra el Granada, volvió a ser el central francés. Está fuera de forma, en un momento de confianza muy bajo y eso el equipo lo pagó muy caro. Era la zona por donde más atacaban los hispalenses y consiguieron el premio en dos ocasiones.
La primera foto en la que salió Umtiti fue en el gol de Jules Koundé en el minuto 25. El central del Sevilla recuperaba un balón en la zona de creación, superaba con suerte a Sergio Busquets y cuando se cruzaba con el central culé se deshacía de él cómodamente y cruzaba el balón ante Ter Stegen. Una acción propia de un ariete.
Umtiti queda retratado en el gol de Koundé / EFE
La realidad es que el central francés pocas opciones tenía para parar al rival. Estaba totalmente estático y el goleador llegaba en carrera. Teniendo en cuenta su lentitud, la única opción posible era hacer falta en la frontal del área y ganarse la amarilla. No lo hizo y la jugada terminó en gol. Mala toma de decisiones.
Una de cal y otra de arena
A principios de la segunda mitad, en el minuto 53, Samuel Umtiti sorprendió con una gran acción defensiva. Youssef En-Nesyri superó a Óscar Mingueza en carrera y, delante del central y último defensor, puso fuerte el pie y consiguió recuperar el balón. Una acción que tenía números de ser el segundo gol. Aquí fue providencial. También rozó el gol en un par de ocasiones a jugadas de balón parado, pero no tuvo suerte.
Pero ni siquiera esta acción consiguió que ganara confianza. En el minuto 85 protagonizó una acción que muestra claramente su pobre estado de forma. Con la defensa adelantada y con el miedo a tener muchos metros por detrás, tiró la línea de fuera de juego de manera lenta y horrorosa. Ólvier Torres, controlando los tempos, filtró un balón a la perfección a su espalda.
Samuel Umtiti durante el partido del Barça contra el Sevilla / FC Barcelona
Ivan Rakitic cogía el carril izquierdo sin oposición --pues Umtiti resbaló cuando quería corregir e ir hacia atrás-- y encaraba a placer a Marc-André Ter Stegen. El resto es conocido por todos. El croata marcaba el segundo gol del Sevilla contra su exequipo y ponía la eliminatoria todavía más complicada.