El partido del FC Barcelona contra el Rayo Vallecano podría haber sido una goleada, pero no fue así. Se disparó tres veces al palo y se crearon ocasiones suficientes para no terminar sufriendo. Parece que con Ronald Koeman ya es una costumbre sufrir y este miércoles se tuvo que remontar el gol de los locales (1-2).
Se consiguió dar la vuelta a la situación gracias a una reacción muy rápida del equipo. Fue clave la entrada de Jordi Alba por Junior Firpo, que aportó profundidad para romper al espacio. Así llegó el gol del empate en el minuto 69, seis minutos después del tanto vallecano.
Un gran pase de Frenkie de Jong a Antoine Griezmann le dejaba en una posición de uno contra uno con Dimitrievski. El francés, después de dar varios toques desesperantes y ver como se le acercaban los defensas, decidió dar un pase milimétrico a Leo Messi para que este la empujara a pocos metros de la línea de gol.
Messi, celebrando su gol ante el Rayo | EFE
El gol era importante, reacción inmediata para seguir aferrado a la Copa del Rey. Todos los jugadores fueron a buscar el argentino, fundiéndose en un abrazo colectivo. Posteriormente el capitán felicitó al 7 por el pase de gol. Una conexión que, aunque no fue recurrente en el partido, cuando se produce da buenos resultados.
Y es que tanto a Griezmann como a Messi se les da bien el Rayo Vallecano. El 10 llevaba 17 goles en 10 partidos contra los madrileños. Ahora ya son 18 en 11 encuentros, números al alcance de muy pocos. Por parte del galo, llegó a la cita habiendo marcado nueve tantos a los vallecanos y llevaba seis partidos consecutivos viendo portería.
Gafado pero indiscutible
Griezmann no ha vuelto a ver portería desde que marcó un doblete en la final de la Supercopa de España contra el Athletic Club (2-3). Se han disputado tres partidos --Cornellà, Elche y Rayo Vallecano-- y, aunque ha tenido oportunidades de ver portería, no ha estado nada acertado.
Antoine Griezmann luchando un balón contra el Rayo Vallecano / FC Barcelona
Aún así, sigue siendo importante en los esquemas de Ronald Koeman. Quizás por falta de competencia o sacrificio defensivo, no se espera que se quede en el banquillo contra los vascos el próximo domingo. Sigue siendo titular pese a ser cada día más prescindible y veremos si seguirá de inicio cuando vuelva Ansu Fati.