Si alguien aprovecha al máximo su rendimiento como jugador del FC Barcelona ese es Ronald Araujo. El central uruguayo está reemplazando a un buen nivel la ausencia de Gerard Piqué para el conjunto azulgrana. En cada partido que disputa, Araujo aporta tanto en defensa como en ataque y se hace notar.
Este jueves en la victoria ante el Cornellà (0-2) que ha clasificado al Barça para octavos de final de la Copa del Rey, el uruguayo volvió a ser decisivo también en las tareas ofensivas del Barcelona. Provocó el penalti que falló Miralem Pjanic en el 39’ generando que Albert Estelles le hiciera una falta dentro del área y protagonizó varios intentos de remate de cabeza en los córners azulgranas, siempre muy peligrosos.
Araujo jugando contra el Cornellà / FC Barcelona
Araujo ha desbancado a Clément Lenglet, que este jueves en Cornellà fue el capitán del equipo, como responsable de la zaga defensiva del Barça. Junto a él, Óscar Mingueza ejerce de escudero polivalente para el central uruguayo.
Intimidación para los rivales
Su portento físico y su aportación técnica hacen de Araujo un central que intimida a los rivales del Barça. Con sólo 21 años, ya se ha ganado la titularidad en el primer equipo y recuerda en su solidez y en su velocidad a míticos defensores azulgranas como Carles Puyol o Javier Mascherano.
Además, Araujo tiene un potencial aéreo que es crucial en las dos áreas del terreno de juego. A pesar de su juventud, el central uruguayo tiene una gran capacidad correctiva cuando comente algún error, y es rápido cuando conduce el balón o va a tapar a algún contrario aunque mida 1.88 metros.
Ronald Araújo y Óscar Mingueza como pareja de centrales ante la Real Sociedad / EFE
Pero lo más destacable del uruguayo es su constante nivel de concentración cuando está sobre el césped. Araujo ha conquistado la zaga defensiva azulgrana y apunta a ser el nuevo compañero de Piqué, en detrimento de Lenglet, cuando el central catalán se haya recuperado de su lesión y regrese a la plantilla de Ronald Koeman.