Uno de los jugadores que esta temporada está marcando diferencias en el FC Barcelona es Pedri González. El futbolista canario volvió a dejar muy buenas sensaciones en la victoria en Granada (4-0). El de Tegueste demostró una vez más la magia que tiene sobre el césped.
Jugó de nuevo como mediocentro avanzado y tuvo acciones muy brillantes ante el conjunto granadino. Volvió a dar un recital de fútbol haciendo un regate en una baldosa y estuvo a punto de sacar un buen lanzamiento. Una vez más, lejos de decepcionar, Pedri volvió a ilusionar con su ritmo de juego y su clarividencia como director de orquesta del equipo con tan sólo 18 años recién cumplidos.
Griezmann, Mingueza y Pedri sonrientes ante el Granada / EFE
El canario tuvo gestos, detalles, visión y colocación en el juego del Barça en Granada. Fue por eso que Ronald Koeman decidió mantenerlo sobre el terreno de juego hasta el 73’, dejando sólo 20 minutos de juego para su recambio esta temporada, Francisco Trincao.
El rey de Bilbao
Es cierto que Pedri no estuvo tan acertado en Granada como en Bilbao. Participó menos y no protagonizó ninguna ocasión de gol. Pero su rendimiento partido tras partido va a más. Tanto es así que ha multiplicado con siete su valor de mercado, llegando a los 50 millones de euros, en tan sólo seis meses en el Barça.
En San Mamés, el joven canario fue la esperanza de los culés, y en especial, la ilusión de Leo Messi. Pedri fue el rey de Bilbao. Abrió la lata y asistió al astro argentino en el segundo tanto azulgrana.
Pedri generó dos ocasiones muy claras de gol ante el Huesca / FC BARCELONA
Su conexión con Leo le ha devuelto la sonrisa al argentino. Además, su nivel a pesar de su corta edad augura un futuro prometedor para el Barcelona mientras un jugador de su talla sea una pieza clave del equipo. Pedri lo ha jugado casi todo este año con Koeman. Veremos qué puede ofrecer el canario en los play-offs de esta semana de la Supercopa de España.