Koeman consolida el 4-3-3 con Griezmann y Dembelé
El entrenador holandés volvió a apostar por el sistema de los últimos años
9 enero, 2021 21:37Victoria convincente del FC Barcelona contra el Granada (0-4). Los goles de Leo Messi y de Antoine Griezmann fueron la guinda al pastel a una buena actuación, que fue de menos a más y terminó con una auténtica exhibición de fútbol. Tres victorias consecutivas, la primera vez que se hace este curso en Liga.
En el Nuevo Los Cármenes Ronald Koeman apostó de nuevo por el 4-3-3, sistema que ya tuvo éxito en San Mamés. La distribución repetía por segunda jornada consecutiva: Sergio Busquets en medio y Frenkie de Jong y Pedri González en los interiores. En ambos encuentros dominaron el centro del campo.
Los jugadores del Barça celebran el gol de Griezmann contra el Granada / EFE
Casualidad o no, las dos mejores actuaciones del Barça han llegado esta temporada con el 4-3-3 y no con los otros dos sistemas que había puesto en práctica el técnico: el 4-2-3-1 y el 5-3-2. Con tres centrocampistas, se ocupan mejor los espacios y se conecta más la defensa y el ataque, sin correr más de la cuenta y atacar con prisas.
Libertad y toque
Una de las características del Barça de Koeman es la libertad de movimientos de sus hombres. De Jong y Pedri tienen tendencia y permiso a ir hacia arriba cuando lo consideren necesario, así se vio en el tanto de Huesca o el primero en Bilbao. En el caso de Busquets, este sábado ayudó a dar salida al balón desde atrás, pues de centrales había Óscar Mingueza y Samuel Umtiti.
En ataque, también se da carta blanca. Ousmane Dembelé, que partió de la derecha, insistió buscando la profundidad y el uno contra uno. Antoine Griezmann, en la otra banda, partía hacia adentro y dejaba un carril libre para Jordi Alba. Finalmente, Leo Messi, ejerciendo de falso nueve acudía a la ayuda donde y cuando así lo necesitaban sus compañeros.
Griezmann y Messi se abrazan tras el gol del francés ante el Granada / FC BARCELONA
Poco a poco se está consolidando el 4-3-3, algo que Koeman se resistía a poner en práctica. Con este sistema se han visto los ataques más corales, se ha replegado mejor en defensa y se ha controlado el juego teniendo la posesión. Todo apunta que será la línea a seguir en los próximos partidos.