Año nuevo, vida nueva. Eso intentará el FC Barcelona, que ha dejado atrás uno de los peores años de su historia reciente. Todo lo que podía salir mal, salió mal. 2020 fue el año de los tres entrenadores, el coronavirus, el 2-8, las pérdidas económicas y la ausencia de títulos, algo que no sucedía desde 2014.
El Barça de Koeman afronta 2021 con la esperanza de remontar el vuelo y dejar atrás de verdad 2020. El estado actual del equipo azulgrana no deja demasiado lugar al optimismo, pero los aficionados pueden soñar con que el cuadro catalán crezca con el paso de los meses. Y el propio FC Barcelona debe marcarse una serie de objetivos para que los culés recuperen la ilusión.
Sentar las bases
El más importante de todos es sentar las bases para tener un equipo competitivo la próxima temporada. Siendo realistas, se antoja complicado que el conjunto blaugrana pueda ganar la Champions o la Liga este año. El desarrollo de jóvenes como Pedri, Araujo, Trincao, Dest, Ansu Fati, Frenkie de Jong, Mingueza o Riqui Puig, entre otros, debe ser una de las prioridades del Barça de Koeman.
Pedri, lamentando el empate contra el Eibar | EFE
Más allá de las incorporaciones que se puedan producir en invierno o verano, hoy por hoy ellos serían los encargados de liderar el FC Barcelona del futuro. El crecimiento de futbolistas como Lenglet, Griezmann, Pjanic o Coutinho, que este curso todavía no han rendido al nivel esperado, también es importante. Como lo es que Dembelé siga con la progresión que ha exhibido hasta la fecha.
Títulos
Aunque la situación actual invite a pensar más en la temporada que viene que en la presente, un equipo como el Barça debe seguir creyendo que puede ganar todos los títulos. La Supercopa de España, que se disputará en dos semanas, y la Copa del Rey, que empezará a finales de este mes, son los dos títulos más accesibles hoy por hoy, pero no los más ilusionantes.
Una foto del Barça tras proclamarse campeón de la Copa del Rey
La Liga se ha complicado enormemente, pero el FC Barcelona está obligado a pelearla hasta el final. El Atlético de Madrid se encuentra a diez puntos con un partido menos, pero quedan 23 encuentros por delante y puede pasar de todo. Además, los colchoneros no están acostumbrados a cargar con el peso que supone ser favorito en una competición.
Por lo que respecta a la Champions, la derrota contra la Juventus en el Camp Nou fue un golpe de realidad. El París Saint-Germain será el rival del equipo azulgrana en octavos de final. El conjunto parisino pasa una profunda crisis tras la destitución de Thomas Tuchel y se desconoce cómo llegará a la eliminatoria. Aunque a día de hoy el Barça está lejos de los grandes de Europa, ha demostrado ser capaz de lo mejor y lo peor,ç por lo que no se le debe descartar de la pelea.
Messi
Otra meta del club catalán es la renovación de Leo Messi, cuyo contrato finaliza el 30 de junio de este año. De hecho, es libre para negociar con el equipo que quiera a partir de este 1 de enero. El delantero argentino ya ha anunciado que esperará hasta el final de temporada para tomar una decisión.
Leo Messi, en un partido con el Barça | EFE
Esta labor no es algo que vaya a depender de Koeman, quizás tampoco del próximo presidente. Si el 10 toma la decisión de marcharse, será muy difícil hacerle cambiar de parecer. Sea como sea, la entidad debe trabajar a destajo para tratar de convencerle. Ya se vio frente al Eibar lo que sufre el conjunto culé sin él.
La economía
Dejando de lado el tema puramente deportivo, es vital que el FC Barcelona mejore su situación económica. 2020 ha sido un año catastrófico en este apartado. La deuda se duplicó, la plantilla se sometió en dos ocasiones a un recorte salarial, se cerró el ejercicio con unas pérdidas de 97 millones y se tuvieron que hacer operaciones como el Pjanic-Arthur o el traspaso de Semedo para minimizar daños.
El aumento de ingresos es fundamental para que el Barça pueda volver a competir por todos los títulos con garantías. Debe ser, sin duda alguna, el principal objetivo de 2021. Sin olvidar, claro está, la parcela deportiva.