Los problemas de Koeman con el vestuario del Barça

Las verdades duelen. En el FC Barcelona, los jugadores no están acostumbrados a un técnico como Ronald Koeman. Directo, sin pelos en la lengua y duro. Por eso, en el seno del vestuario azulgrana empiezan a estar un poco mosqueados con el holandés.

Koeman siempre es muy claro en las ruedas de prensa. Pero los jugadores se quejan de que, cuando el equipo pierde, su técnico les culpa de su bajo rendimiento y no hace autocrítica con su sistema táctico o su planteamiento del partido.

Koeman en el Camp Nou controlando un balón / FC BARCELONA

Koeman en el Camp Nou controlando un balón / FC BARCELONA

Esta actitud del holandés no gusta a las vacas sagradas del Barça, acostumbrados a que los entrenadores entonen un poco más con el discurso de asumir responsabilidades cuando las cosas no van bien. Pep Guardiola, Luis Enrique y Ernesto Valverde siempre protegieron ante la prensa a sus jugadores, como también lo hacen en la actualidad el Cholo Simeone y Zinedine Zidane. Pero Ronald no se anda con chiquitas y dice siempre todo tal y como lo piensa.

Objeto de los puristas

Además, tras la derrota en el Camp Nou ante la Juventus (0-3), los puristas del barcelonismo y el fútbol formativo azulgrana han señalado a Koeman por emplear esquema táctico de 4-2-3-1, en vez del tradicional 4-3-3. El más destacable de ellos, fue un jugador de la plantilla. Tras perder contra el equipo de Cristiano Ronaldo, Ter Stegen arremetió contra el sistema defensivo que actualmente emplea el Barça.

Un recadito para el técnico holandés que encontró apoyo en otros exazulgranas como Miquel Soler. Por el contrario, otras voces se han levantado en favor al holandés, como el candidato a la presidencia del Barcelona, Xavier Vilajoana, o el exentrenador Juan Carlos Unzué.

Ronald Koeman en el Wanda Metropolitano / EFE

Ronald Koeman en el Wanda Metropolitano / EFE

Ante esta situación, está por ver qué hará Koeman en el próximo partido del Barça ante el Levante el próximo domingo. Pero lo más probable es que el holandés siga siendo fiel a sus propias convicciones. Como ya ha dicho el técnico azulgrana públicamente en ruedas de prensa, “entiendo las críticas, es normal. Las acepto, las asumo, y sigo trabajando en mejorar cosas”.