Pocas cosas se pueden salvar de la última actuación del FC Barcelona contra la Juventus de Turín (0-3). Fue un conjunto de malas sensaciones exceptuando la aparición sobre el césped de Riqui Puig en el segundo tiempo. El de Matadepera salió en el minuto 66 y mostró una actitud que no tenían la mayoría de sus compañeros.
El canterano se movió entre líneas, se desmarcó, pidió balón y lo intentó. En 24 minutos, tocó 50 balones, una cifra que supera a muchos compañeros que tuvieron más minutos como Pedri González o Antoine Greizmann y rivales como Cristiano Ronaldo. Tuvo un acierto de 92,7% de precisión en los pases.
Riqui Puig contra la Juventus de Turín / FC Barcelona
El 12 ocupó la posición en la mediapunta, intentando hacer de conexión con la medular y la delantera. Llegó a disparar a portería y mostró un atrevimiento que no era habitual. Fue de los pocos puntos positivos del encuentro contra los italianos y pide a gritos más oportunidades a Ronald Koeman.
Riqui Puig, una solución real
Riqui Puig era uno de los descartados en pretemporada por parte del entrenador holandés. El joven decidió no salir cedido y quedarse en el Barça luchando por una oportunidad. No ha tenido muchas, pero cuando ha podido salir, siempre ha aportado cosas interesantes.
Este curso solamente ha aparecido en cuatro encuentros: uno de Liga y tres de Champions League. Jugó tres minutos contra el Getafe (1-0), 24 contra la Juventus (0-3), 25 Ferencvaros (0-3) y 25 contra el Dinamo de Kiev (0-4). Pocas oportunidades que, viendo la actuación contra los turineses, pueden ir a más.
Carles Aleñá, Riqui Puig y Antoine Griezmann contra el Dinamo de Kiev / FC Barcelona
El de Matadepera se ha colocado como una de las opciones reales de Ronald Koeman para avivar a un centro del campo que deja serias dudas. En el 4-2-3-1 no existen interiores y no terminan de verlo en el doble pivote. Si no se cambia de sistema, competirá con Messi, Pedri y Coutinho.
Aleñá, sin oportunidades
Hay pocas explicaciones para entender la poca participación de Carles Aleñá. El centrocampista de 22 años también ha jugado cuatro encuentros con Koeman y se quedó sin minutos contra la Juventus a pesar de su buena actuación en Kiev y en Hungría. Como sucede con Puig, parece no tener cabida en el 4-2-3-1.