Desde que llegó este verano, el técnico del FC Barcelona, Ronald Koeman, lleva reclamando que el club fiche a un delantero. Pero en el clásico de este sábado ante el Real Madrid en el Camp Nou (1-3), Ansu Fati jugó de delantero puro y marcó el gol número 400 del Barça en un clásico.
Fati fue el principal movimiento táctico del holandés. La gran novedad junto con la entrada en el once titular de Pedro González ‘Pedri’, para poner al canario por la derecha y a Philippe Coutinho por la izquierda.
Antes del partido, Ansu fue premiado como el mejor jugador de la Liga en septiembre / FC BARCELONA
El problema fue que, aparte de marcar el gol del 1-1, Ansu no hizo gran cosa más. Quizás, el problema fue que el joven delantero jugó sin el apoyo de extremos puros y metió al final a Francisco Trincao y Ousmane Dembelé, cuando ya era demasiado tarde.
Un ‘9’ prometedor
El movimiento estimulante en la delantera del Barça se hizo esperar hasta el día del clásico. Koeman sentenció a Antoine Griezmann y a Sergi Roberto al banquillo, colocando a Fati de falso nueve y provocando una revolución posicional en el ataque.
Leo Messi, el 10, jugó de ‘10’ y Pedri y Cou jugaron por dentro, para dejar a los laterales todo el carril libre, algo que Sergiño Dest supo aprovechar muy bien.
Celebración de Ansu Fati su primer gol en un clásico / FC Barcelona
A pesar de la derrota para el equipo azulgrana, el Barça planteó un partido muy abierto desde su inicio, obligando al desgaste físico del Madrid para cerrar los espacios, hecho que hizo que en el 25’, ya hubiera habido un total de siete disparos a portería entre los dos conjuntos.