Uno de los nombres propios de la derrota del Barça ante el Real Madrid en el primer clásico de la temporada fue Sergiño Dest. El lateral se estrenó en su primer FC Barcelona-Real Madrid, convirtiéndose en el primer jugador norteamericano en disputar el clásico. Y lo hizo, por primera vez desde que llegó a Barcelona, desde su posición ideal: el lateral derecho.
Ronald Koeman sorprendió en su once con los blancos, al dar entrada a Jordi Alba por la izquierda, tras superar in extremis su lesión; y colocar al ex del Ajax por la derecha. Una decisión que demostró que es la que más favorece el juego del conjunto azulgrana.
Sergiño Dest, intentando superar a Sergio Ramos | EFE
El choque permitió a Dest prácticamente graduarse ante todo el barcelonismo, y demostrar que tiene todas las condiciones para ser el lateral del cuadro culé en la próxima década. Fue uno de los grandes destacados en el clásico. Se convirtió en el dueño de la banda derecha. Evidenció su clara inercia ofensiva, pero también su contundencia en defensa. Y sorprendió su capacidad física pese a su 1,75 de altura y su perfil de velocista. Asimismo, también estuvo muy acertado en lo táctico, respondiendo con un notable nivel a todas las disposiciones de Gerard Piqué.
Sergi Roberto, señalado
El gran rendimiento tanto de Dest por la derecha, como Jordi Alba por la izquierda, dejó en muy mal lugar a Sergi Roberto. Hacía tiempo que el Barça no conseguía tanta profundidad con sus laterales. La decisión de Koeman manifestó que la posición ideal del de Reus no es el lateral, donde en los últimos choques se desató en una máquina de perder balones y sin ideas evidentes en el juego. En un jugador mucho más táctico, la falta de velocidad le penaliza en esa posición.
Por tanto, la recuperación del de l'Hospitalet y el crecimiento a pasos agigantados del holandés condenan a Roberto al banquillo. O a jugar en el centro del campo, su lugar por defecto desde que llegó al primer equipo y donde más disfruta en el terreno de juego.
Sergi Roberto, en una imagen de archivo | EFE
El bajo estado de forma de Pjanic junto a las evidencias de que Busquets no es un jugador válido para el doble pívote, hacen que Sergi Roberto pueda volver a tener opciones de jugar en la medular. Los laterales parecen, por primera vez en muchos años, perfectamente cubiertos. Veremos como Koeman consigue que todos sus futbolistas estén cómodos en su esquema, y a la vez no perjudicar el rendimiento del equipo. Pero Dest demostró ante todo un Real Madrid que es el lateral destinado a dominar la banda derecha durante la próxima década.