Pjanic pasa la prueba y se convierte en amenaza real para Busquets

Miralem Pjanic desbancó a Sergio Busquets de la titularidad del mediocampo del FC Barcelona este martes en el primer partido de Champions ante el Ferencvaros (5-1). Busquets ha empezado una temporada en la que Ronald Koeman le había asignado a Frenkie De Jong como su escudero en las labores defensivas. Pero, en los últimos partidos, el holandés tampoco había podido mostrar su mejor nivel.

Es quizás esta la razón por la que su entrenador y compatriota decidió que Pjanic podía ser el hombre adecuado en el doble pivote de mediocentro con De Jong. En su primera titularidad como azulgrana, el futbolista serbio volvió a cumplir con sobriedad. Pjanic tampoco ha hecho de momento ninguna gran proeza con la que Koeman pudiera quitarse el sombrero. Pero cumple. Está atento, bien posicionado y siempre intenta arañar balones al rival, lo cual le ha hecho acabar con las opciones de Riqui Puig y Carles Aleñá.

Trincao, Pjanic y Sergi Roberto ante el Ferencvaros / FC Barcelona

Ansu,Trincao, Pjanic, Sergi Roberto y De Jong ante el Ferencvaros / FC Barcelona

Además, el centrocampista serbio cuenta con la ventaja formidable de controlar con solvencia el pase en largo para proporcionar contras letales a los jugadores de arriba. Una opción que los delanteros del Barça no encontraban con Busquets, que es un perfil que juega mucho más en corto que no para buscar pases al espacio.

Suplente para el clásico

A pesar de que Pjanic fue el máximo pasador del conjunto azulgrana en la victoria ante el equipo húngaro de este martes, el bosnio será suplente en el clásico y Koeman volverá a sacar de inicio a la dupla De Jong-Busquets.

Pero en esta primera titularidad en Europa, Pjanic ha demostrado que domina tanto el pase en largo como en corto, algo vital para aportar riqueza, creatividad y fluidez al estilo de juego del Barça. Igualmente, la intensidad en la presión defensiva es el otro aval del serbio que hace que Busquets deba ponerse las pilas si no quiere pasar la que podría ser su última temporada más minutos en el banquillo que en el verde.