El Barça fue incapaz de superar a un intenso y agobiante Getafe en el Coliseum Alfonso Pérez (1-0) y perdió la oportunidad de dormir líder. El conjunto azulgrana acabó desquiciado ante la temeridad de los azulones, y la permisividad de un arbitraje que no ayudó en ningún momento a los culés.
Los hombres de Koeman cayeron en la trampa de los madrileños, y no encontraron su ritmo ni su juego en ningún momento. Pedri fue de los pocos que dio luz a un conjunto azulgrana que lo intentó hasta el final con más fe y efectivos que eficacia. Primera derrota oficial del técnico holandés, en un tourmalet donde se confirmarán las aspiraciones del equipo en todas las competiciones.
El Barça cae en la trampa del Getafe
Con la derrota del Real Madrid ante el Cádiz, al Barça le apareció de la nada una oportunidad de oro para dormir líderes y llegar por delante de su gran rival al clásico. Sin embargo, los de Koeman tenían claro que no iba a ser fácil. En frente, un Getafe entrenado por José Bordalás que siempre ha puesto las cosas complicadas a los culés.
Era evidente que el estilo rudo y extremadamente intenso de los madrileños no favorecería al juego de posición y de toque del cuadro catalán. Un choque de formas que en la primera parte se llevó el Getafe. Las líneas juntas y la excesiva dureza pudieron ante un FC Barcelona incapaz de hacer daño a los locales.
Leo Messi, en una acción ante el Getafe | EFE
No obstante, con el paso de los minutos, el conjunto azulgrana empezó a encontrar oportunidades, especialmente al contraataque, y liderados por la conexión Messi-Pedri. Griezmann, desde la posición que él deseaba, la de falso 9, tuvo la más clara, pero envió al cielo el balón en un 1 contra 1 ante David Soria. El francés, junto a Dembelé, fueron la peor noticia del Barça en la primera mitad. Perdieron muchos balones y no rindieron en consonancia a sus compañeros.
No tardó el Getafe en parar de forma contundente los mejores minutos del equipo culé. Entradas a destiempo, acciones temerarias y una presión fatigosa, junto a la permisividad del arbitraje, sacaron de nuevo a los de Koeman del choque. Una partida de ajedrez que, en los primeros 45 minutos, favoreció a los azulones.
Jarro de agua fría
El guión no cambió en exceso tras el paso por los vestuarios. El Getafe continuó con su planteamiento conservador y agobiante, ante un Barça sin ideas en los metros finales. La desesperación empezó a llegar al conjunto azulgrana, que además se vio por debajo en el marcador tras un inocente penalti cometido por De Jong. Mata superó a Neto, y ratificó todavía más la idea de Bordalás. Una trampa en la que cayó por completo el equipo de Koeman.
Jaime Mata, celebrando su gol ante el Barça | EFE
Con un Messi desaparecido en la segunda mitad, el técnico holandés apostó por mover el banquillo. Ansu Fati y Coutinho sustituyeron a un apagado e impreciso Dembelé, y a Pedri que fue un rayo de luz en la primera parte. Sin embargo, ni siquiera los cambios renovaron la cara del equipo culé.
Koeman se negó a dar por perdido el choque, y puso a todas sus piezas ofensivas en el terreno de juego. Braithwaite, Trincao, Riqui Puig. No obstante, ni con todas sus opciones en ataque, el Barça fue capaz de hacer daño a un Getafe bien ordenado y que además, contó con la inexorable ayuda del arbitraje, que se lo permitió todo.
David Soria evita el gol de Ansu Fati en el Getafe-Barça | EFE
Primera derrota del Barça de Koeman, en el inicio de un tourmalet donde se confirmarán las aspiraciones del equipo en todas las competiciones. Los culés no consiguieron aprovechar el pinchazo del Real Madrid, con el que se verán las caras la próxima jornada en el Camp Nou. Y ambos llegan en su peor momento de juego y resultados de los últimos años. Todo puede pasar.