El FC Barcelona, en una operación de última hora, prácticamente regaló a Rafinha al PSG. Con el objetivo de reducir el presupuesto en gastos, el club azulgrana le vendió por tres millones en variables. Eso sí, el Barça se ha hecho con el 35% de sus derechos de una posible futura venta.
Koeman no contaba con el brasileño, que además estaba molesto con el club porque no le querían facilitar su salida. Cada vez que llegaba una oferta, remitían a la cláusula. Sin embargo, el miedo a dejarle marchar gratis a partir de enero (acaba contrato en 2021), finalmente ha obligado a los culés a ceder en sus exigencias.
Rafinha bromea con Neymar en su etapa en el Barça | EFE
Por tanto, Rafinha tendrá un trato igual que el que recibieron Luis Suárez, Arturo Vidal e Ivan Rakitic. Una marcha por una cantidad ínfima, para así ahorrarse su ficha. Un fichaje que alegrará especialmente a Neymar, amigo íntimo del carioca, y que ha intercedido para que el centrocampista acabe jugando en París.
Neymar y Rafinha mantienen una excelente relación de amistad, cosa que se pudo ver mientras convivieron en el Barça y también en la selección brasileña. Aunque el menor de los Alcántara no es un fijo, jugó con el delantero del PSG para conquistar el oro olímpico con Brasil en los Juegos de Río, en 2016. Ahora que Rafa tenía un problema, su amigo Neymar intercedió por él y consiguió que se cerrase su llegada al PSG, donde Neymar se sentía menos arropado sin su buen amigo Dani Alves.