Después del empate en el Camp Nou con el Sevilla, Sergio Busquets vuelve a estar en el punto de mira de los más críticos con el renovado FC Barcelona de Ronald Koeman, que piden ya su jubilación.
Para esta temporada, Koeman decidió rescatar el mediocentro ofreciéndole libertad en el campo con un sistema basado en el doble pivote (4-2-3-1), y la figura como escolta de Frenkie de Jong. El técnico holandés ha decidido que debe ser el alumno quien ayude ahora al maestro, evitando así ciertos esfuerzos defensivos que puedan atormentar el fútbol de Busquets.
Sergio Busquets, en el partido ante el Villarreal | EFE
Koeman sigue confiando en Busquets y el vestuario también. Así lo demuestra el hecho de que el de Badia del Vallés ha vuelto a ser elegido como segundo capitán del primer equipo azulgrana. Además, incluso el ex barcelonista Thiago Alcántara alaba la figura de Busi. “Todos los centrocampistas del mundo que queremos evolucionar nos debemos fijar en Busquets”, dijo Alcántara tras el ridículo del Barça en Lisboa ante el Bayern de Munich de este verano perdiendo 2 a 8.
Igualmente, Luis Enrique tampoco ha retirado la confianza en el mediocentro para la selección española este año. Y es que Sergio lleva más de 700 partidos oficiales (más de 580 con el Barcelona, 117 con España) en 12 años. Pero el sector más crítico del barcelonismo opina que Busquets ya no puede ofrecer su mejor versión y que pierde demasiados balones.
Señalado desde 2019
Tras el desastre europeo del Barcelona en Anfield (4-0) en 2019, Sergio Busquets fue uno de los señalados. Los aficionados culés cargaron en su contra en la victoria del Barça ante el Getafe en el Camp Nou de la siguiente semana, ya que Busquets había perdido hasta ocho balones en la primera media hora de partido.
Sergio Busquets, en una acción ante el Celta | EFE
Desde entonces, el centro del campo del equipo azulgrana ha estado en el punto de mira de la afición azulgrana, ya fuera por su edad, por su alto salario, o por ser uno de los grandes líderes de la vieja guardia del vestuario.
El fichaje de Miralem Pjanic tras el intercambio con Arthur Melo llevó a los aficionados a pensar en un Barça sin Busquets. Pero al mediocampista le quedan tres años de contrato y Koeman cuenta con él como titular, a pesar de que Pjanic sea su relevo.
Aun así, al igual que le pasa a Antoine Griezmann o a Sergi Roberto, Busquets ya no es imprescindible para el Barça y un sector de la afición ya no quiere verle de titular.