Ya nadie esconde desde hace meses que Éric García es uno de los objetivos de la secretaría técnica del FC Barcelona. El club busca cerrar tres incorporaciones que den un impulso a la plantilla de Ronald Koeman: un central de presente y de futuro, un lateral y un delantero referencia.
Todas estas incorporaciones dependerán de las salidas. Se espera que Nelson Semedo sea traspasado al Wolverhampton en las próximas horas. Con ese dinero, se irá a por el central catalán del Manchester City. Termina contrato en verano de 2021 pero los del Etihad Stadium no están por la labor de regalarlo.
Según explicó este domingo Josep Pedrerol en el programa El Chiringuito de Jugones, ambos clubes ya habrían llegado a un acuerdo. Se abonarían unos 18 millones de euros y Éric García volvería así a su casa. Esta es la cifra máxima a la que los culés están dispuestos a llegar, sino deberá esperar una temporada más y llegar gratis.
Como ya informó Culemanía hace unas semanas, la primera oferta fue de unos cinco kilos, una cantidad que se rechazó automáticamente. Por parte de los ingleses, se pedían 23 millones de euros, pero prefieren rebajar las pretensiones e ingresar algo antes de que salga totalmente gratis dentro de un año.
Antes, Txiki Begiristain y Pep Guardiola trabajan en la llegada de un central. Ficharon a Nathan Aké hace unos meses, pero quieren más. Suena con fuerza Kalidou Koulibaly, del Nápoles, que podría salir de la Serie A si alguien abona 70 millones de euros. La salida de Éric García dejaría el equipo tocado.
Pendientes de Semedo
Mientras el City está pendiente de la llegada de un central consolidado, el Barça también tiene que esperar. El desenlace de la operación depende de la venta de Nelson Semedo, a un paso del Wolverhampton. Los culés ingresarían entre 35 y 40 millones de euros y se iría a por el central y a por Sergiño Dest, su recambio natural.