El futuro de Leo Messi sigue siendo una completa incógnita. La posición del jugador es clara: su contrato acabó al final de esta temporada, tras ejercer la cláusula liberatoria que le permitía salirse de su contrato automáticamente, y de forma gratuita. En cambio, la posición del Barça es que esta cláusula caducó el pasado 10 de junio, y por tanto queda ligado al club hasta finales de 2021.
Ambas partes están destinadas a pactar y entenderse. Y es que sino, ninguno saldrá favorecido. Josep María Bartomeu sigue rehacio a dejar escapar a su estrella. Eso sí, si acaba cediendo será por un traspaso millonario. En cambio, Leo tiene en su mano pedir el transfer a la FIFA para jugar en otro equipo, pero podría arriesgarse a que la justicia ordinaria no le diese razón, y tuviese que pagar una multa considerable.
Leo Messi en un choque del Camp Nou / EFE
Y en esta historia hay también un tercer protagonista: el Manchester City. El conjunto entrenado por Pep Guardiola es el mejor colocado para fichar al rosarino. De hecho, diferentes informaciones apuntan a que ya tendría incluso cerrado un acuerdo con el jugador. Sin embargo, los citizens no lanzarán su ofensiva final hasta que se cumpla una condición indispensable.
Solo si llega gratis
Cuando saltó la bomba, en el Etihad Stadium se emocionaron y se mostraron optimistas por poder conseguir a Messi. Sin embargo, con el paso de las semanas, y viendo la guerra entre el club culé y el jugador, este positivismo ha desaparecido por completo. De hecho, fuentes cercanas a la entidad inglesa apuntan a que su incorporación solo sería posible si llega con la carta de libertad.
Los Skyblue están bajo la lupa del control financiero de la UEFA, tras librarse de la sanción de dos años sin jugar la Champions. No pueden arriesgarse. Y tras hacer cálculos, han llegado a la conclusión de que les será inasumible pagar un traspaso por el 10 y a la vez asumir la alta ficha del argentino. Incluso desprendiéndose de algunas de sus piezas importantes, la operación se antoja inviable.
Messi con Guardiola / EFE
Por lo que el City renunciará a pelear por Messi, a no ser que el todavía capitán azulgrana consiga marcharse gratis del Camp Nou. Asimismo, en Manchester tampoco son partidaris de arriesgarse a pedir el transfer provisional a la FIFA y después esperar que un juez determine el coste de la operación, ya que debería provisionar una cantidad muy elevada de millones y, por tanto, habría que correr demasiados riesgos. Se le complica la salida del FC Barcelona a Leo Messi.