El barcelonismo sigue esperando que Leo Messi rompa su silencio, y de explicaciones. El futbolista argentino ha mantenido un silencio total tras la debacle del equipo en Champions ante el Bayern. El todavía capitán culé se comunicó, vía burofax, con el club para comunicarle su deseo de marcharse este mismo verano, a poder ser de forma gratuita.
La respuesta del Barça fue contundente: cuentan con él para liderar la revolución del vestuario, e incluso Bartomeu habría puesto la presidencia en sus manos, si así lo requiere, para que continúe. Todas las informaciones apuntan a que ni siquiera eso le hará cambiar de opinión. Su ruptura con la directiva, junto a la falta de un proyecto deportivo que le ilusione para sus últimos años, le llevarán a salir del Camp Nou en las próximas semanas.
Leo Messi y Josep Maria Bartomeu en una gala de la Bota de Oro / EFE
En caso de finalmente optar por marcharse, el FC Barcelona intentará sacar una cantidad importante por él. Manchester City y PSG son, en estos momentos, los más interesados en su contratación. Y posiblemente los únicos que pueden permitirse una operación de tal calibre.
Sin embargo, no hay todavía ninguna confirmación oficial. Todas las noticias que han aparecido han sido filtraciones, ya sea por parte del entorno de Messi o del club, a la prensa. Un culebrón que hace días que se extiende, y sin que ninguna de las partes haya sido capaz todavía de dar la cara, y dar explicaciones a los aficionados.
Messi se prepara para dar su versión
Una respuesta que podría llegar en las próximas horas. Messi quiere controlar los tempos, y ser él el que decida cómo y cuándo se dirigirá al barcelonismo para anunciar su despedida. Así lo confirma su entorno. El crack rosarino hablará de forma pública, pero sigue analizando la fórmula más adecuada.
Una rueda de prensa es la alternativa más arriesgada, y menos probable. Hacerla a espaldas del club no sería lícito. Además, ante la situación de emergencia provocada por el coronavirus, intentará evitar aglomeraciones. En este sentido, son dos las opciones que cogen fuerza: comunicarlo a través de las redes sociales, o en una entrevista a algún medio de comunicación en concreto, posiblemente de su país.
Si el domingo no se ha resuelto su situación, deberá presentarse a las pruebas PCR y el lunes a los entrenamientos con Koeman. Por tanto, la opción más posible es que sea ese mismo día, con la presencia de su padre y representante, Jorge, que llega de Argentina, cuando se pronuncie. O incluso el día antes, para preparar el terreno. Lo que es seguro es que Leo hablará, y dará al barcelonismo todas las explicaciones que merecen.