Koeman llegó la semana pasada en el cargo de entrenador del Barça con la necesidad de reflotar al equipo. Una de las principales misiones que tiene es la de deshacerse de algunos de los pesos pesados. Varios de estos han bajado su rendimiento en los últimos años, además que tienen unas fichas muy altas y taponan la progresión de los jóvenes. El técnico, por lo tanto, ya ha empezado a contactar con los jugadores y expresar con quiénes cuenta y con cuáles no.
De este modo, esta mañana RAC1 ha informado que el holandés ya ha llamado a Luis Suárez para comunicarle que no cuenta con él, confirmando la información publicada por Culemanía el pasado 18 de agosto. Asimismo han detallado que el delantero no había sido notificado sobre la vuelta a los entrenamientos y que en las próximas horas los abogados del jugador se reunirán con el club para acordar la rescisión de contrato.
La baja del uruguayo era seguramente una de las más importantes de cara al futuro. Su marcha, si finalmente se produce, permitirá iniciar un gran cambio en la delantera y liberar el segundo mayor sueldo, que da más margen para fichar y aligerar la masa salarial.
Además de la llamada a Suárez, Koeman también comunicó a Arturo Vidal y Rakitic que no tienen hueco en la plantilla. Estas dos bajas eran más previsibles desde hace tiempo, pero también son importantes para dar espacio a Riqui Puig o Pedri.
Otro con quien Koeman no cuenta es Samuel Umtiti, que no tiene la condición de peso pesado que sí que ostentan los otros tres citados, pero que también tiene un salario elevado. Su bajo rendimiento desde que se operó la rodilla tras ganar el Mundial con Francia en verano de 2018 obliga al club a buscarle una salida.
El futuro de Alba, Busquets, Piqué y Messi
Por el contrario, hay otros pesos pesados que tienen más opciones de quedarse. A pesar que las primeras informaciones apuntaron que tampoco se contaba con Jordi Alba y Busquets, ahora la situación se ha revertido. Sport explica que el técnico le ha expuesto al lateral que lo considera un jugador importante, por lo que puede respirar más tranquilo. Ambos, de hecho, coincidieron en el Valencia cuando el jugador aún era juvenil.
Por su parte, ahora mismo la intención es que no se le diga al centrocampista que tiene que marcharse, pero sí que su rol será de suplente. De este modo seguramente tendrá que ser el propio jugador quien decida si quiere quedarse o no.
Asimismo, Piqué también aún tiene un papel destacado y se contará con él. Finalmente aún se mantiene la gran duda en el barcelonismo sobre el futuro de Messi. El argentino ya le expresó que no tiene clara su continuidad, aunque Koeman apuesta claramente por él como pilar del equipo.